El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, visitó este sábado diversas áreas de La Habana afectadas por el paso del huracán Rafael, con el fin de supervisar las labores de recuperación tras los daños causados a infraestructuras y servicios básicos.
A través de la cuenta oficial de la Presidencia de Cuba en X (anteriormente Twitter), se documentó el recorrido del mandatario por algunas localidades de la capital, incluyendo su visita al preuniversitario Eduardo García Delgado. En este centro educativo, trabajadores, estudiantes y vecinos se han visto obligados a colaborar en las tareas de limpieza y restauración de la zona. Aunque el centro no sufrió daños estructurales graves, la caída de árboles y otros escombros ha complicado la situación en la comunidad. Ante esto, Díaz-Canel hizo un llamado urgente a agilizar la recolección de basura y exhortó a los residentes y centros de trabajo a involucrarse activamente en las labores de limpieza.
Uno de los puntos más impactados por el huracán fue el reparto San Agustín, en el municipio de La Lisa, donde decenas de familias llevan más de 72 horas sin servicio eléctrico. Durante su recorrido por otros municipios como Marianao, Playa y Plaza de la Revolución, Díaz-Canel interactuó con trabajadores y residentes, quienes se han visto forzados a improvisar con recursos limitados para restaurar la red eléctrica y limpiar las calles.
En sus declaraciones, el presidente reiteró el mensaje de “Cuba está de pie”, asegurando que, al igual que en otras ocasiones, la isla superará la crisis. “Vamos a salir de esta, como hemos salido de otras”, enfatizó, destacando la unidad del pueblo cubano y el aparente compromiso de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y la juventud con la revolución.
Las recientes visitas del mandatario, documentadas ampliamente en redes sociales y medios de comunicación oficiales, han subrayado un discurso de “unidad y resistencia”. Díaz-Canel ha recorrido diversas provincias de Cuba, donde el huracán Rafael dejó significativos daños, especialmente en el sistema eléctrico y en las vías públicas. En su recorrido, también destacó la importancia de la solidaridad en la recuperación de las áreas afectadas.
En su visita a Artemisa, el presidente prometió que “nadie quedará desamparado” y se comprometió a brindar apoyo a las familias más afectadas. Sin embargo, un sector de la población se muestra escéptico ante estas promesas, dado el historial de dificultades para acceder a recursos y ayudas gubernamentales tras eventos meteorológicos anteriores.
Por otro lado, Díaz-Canel calificó de “campaña mediática” las afirmaciones sobre un posible colapso en Cuba, insistiendo en que la situación está siendo gestionada de manera efectiva y que la nación saldrá adelante gracias a la “resiliencia del pueblo cubano”. Sin embargo, las críticas continúan, especialmente en relación con la percepción de la eficacia de las respuestas gubernamentales ante las emergencias.
La situación sigue siendo tensa en las áreas más afectadas, donde la recuperación de servicios básicos y la reconstrucción de infraestructuras siguen siendo tareas prioritarias para el gobierno cubano.