El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este jueves que uno de sus principales enfoques al asumir nuevamente la Casa Blanca en enero será garantizar la seguridad en la frontera con México.
En una entrevista exclusiva con NBC News, Trump reveló que tiene planeada la implementación de un programa de deportaciones masivas, centrado en la expulsión de individuos peligrosos, como asesinos y narcotraficantes, quienes, según él, no deben permanecer en el país.
“La seguridad en la frontera será una prioridad. No es una cuestión de costo, realmente no tenemos otra opción”, declaró Trump. “Hay personas que han matado, asesinado, y capos de la droga que han destruido países. Ellos van a regresar a esos países porque aquí no se quedan”, agregó, subrayando que la deportación de estas personas no se trata de un tema económico, sino de una necesidad de seguridad.
Además, el presidente electo destacó que su política migratoria no se limitará solo a las deportaciones. También enfatizó su interés en fomentar la llegada de personas y empresas que puedan contribuir positivamente al país, pero siempre bajo el marco legal. “Queremos que la gente venga. Vamos a tener muchas empresas que vendrán a nuestro país. Queremos que las compañías y las fábricas vengan”, aseguró Trump, a la vez que aclaró que solo aquellas personas sin antecedentes criminales y que ingresen legalmente serán bienvenidas.
Trump también reiteró que su enfoque migratorio se centrará en expulsar a aquellos que representen una amenaza para la seguridad nacional. “Los votantes están de acuerdo con mi enfoque de deportar a asesinos, narcotraficantes y miembros de pandillas. Ellos no deberían estar aquí”, afirmó.
En la misma entrevista con la periodista Kristen Welker, el presidente electo hizo un balance de su apoyo electoral, resaltando incluso el respaldo recibido de la comunidad latina, a pesar de la retórica antiinmigrante que ha marcado sus campañas anteriores.
Trump atribuyó en parte su victoria a su postura firme sobre la inmigración, destacando que muchos votantes apoyan la idea de tener fronteras seguras y un proceso migratorio ordenado. “Quieren tener fronteras y les gusta que la gente venga, pero tienen que venir con amor por el país. Tienen que venir legalmente”, concluyó el presidente electo.