Cuba a oscuras: Apagones y 8 termoeléctricas fuera de servicio antes de la tormenta Rafael

Redacción

Cuba se encuentra en la antesala de una nueva crisis de apagones mientras la tormenta tropical Rafael se aproxima a sus costas. Con un déficit de generación eléctrica que alcanza los 1,440 MW y la desconexión de ocho unidades termoeléctricas, el país enfrenta serias preocupaciones sobre la estabilidad de su frágil sistema eléctrico nacional (SEN). La inminente llegada de Rafael, que se espera pueda convertirse en huracán en las próximas horas, solo aumenta los temores de un colapso energético, un escenario temido por millones de cubanos.

La historia reciente de apagones en Cuba sigue viva en la memoria de la población, especialmente después del colapso total del SEN hace tan solo unos meses. En esta ocasión, las predicciones meteorológicas alertan sobre posibles fuertes vientos y lluvias intensas, condiciones que podrían impactar nuevamente la infraestructura eléctrica del país. A medida que Rafael se dirige hacia el occidente de la isla, los cubanos temen una situación similar a la ocurrida con el huracán Oscar, cuando un gran apagón dejó sin electricidad a gran parte de la nación, afectando también servicios básicos como la televisión, el internet y, en algunos casos, hasta la comunicación por radio.

Déficit energético crítico y cortes programados en medio de la tormenta

La situación energética del país se ha vuelto insostenible. Según la Unión Eléctrica de Cuba (UNE), la disponibilidad de generación eléctrica para este martes se estima en solo 1,730 MW, frente a una demanda máxima de 3,100 MW. Este marcado déficit genera una afectación de 1,440 MW en los horarios de mayor consumo, con un impacto particularmente fuerte en la zona centro-oriental del país. Las autoridades anticipan cortes de luz significativos y prolongados, en especial si el fenómeno meteorológico impacta de manera directa en las áreas más vulnerables de la red.

Mientras el país mantiene su mirada fija en el trayecto de Rafael, la atención también recae en el funcionamiento de la principal planta termoeléctrica del país, la Antonio Guiteras, ubicada en Matanzas. La UNE ha advertido que el desempeño de esta planta es crucial para el funcionamiento del SEN en medio de esta crisis.

Termoeléctricas fuera de servicio y escasez de combustible agravan la crisis

Actualmente, la UNE reporta la “avería” de cuatro unidades de generación termoeléctrica: las unidades de Mariel, Nuevitas, Felton y Rente. Otras cuatro unidades se encuentran “en mantenimiento”, lo que reduce aún más la capacidad de generación de electricidad en el país. A esto se suma la escasez de combustible, que ha dejado fuera de servicio a 76 centrales de generación distribuida, además de motores en las plataformas flotantes de Melones y Santiago de Cuba, que en conjunto representan una pérdida de 590 MW.

El ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, ha declarado que el país cuenta con combustible, pero problemas logísticos y las condiciones adversas del mar han dificultado el atraque de las embarcaciones encargadas de su suministro. Sin embargo, la UNE sigue reportando escasez de combustible, un problema que persiste y agrava la vulnerabilidad de la red.