El Centro de Pronósticos del Instituto de Meteorología de Cuba ha emitido una alerta este viernes por la continuidad de fuertes lluvias en el norte oriental del país, con especial atención a las provincias de Holguín y Guantánamo, que enfrentan severas inundaciones desde la madrugada.
Según el informe, las intensas precipitaciones, que han sido recurrentes en las últimas 24 horas, son resultado de una vaguada frontal y la inestabilidad de una onda tropical situada al sur de la región.
Las autoridades han comenzado a implementar evacuaciones en localidades afectadas, incluyendo Baracoa y Cabacú, donde los ríos, como el Miel, han desbordado sus cauces, inundando calles y complicando aún más la situación tras el paso del huracán Oscar.
El primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, ha declarado que se iniciarán las evacuaciones en Baracoa y ha instado a los pobladores a estar alerta y a seguir las instrucciones de evacuación ante el aumento de la peligrosidad en la región.
La angustia entre los residentes es palpable. Eriner Labañino, un habitante de Baracoa, compartió su desesperación: “Mi hogar está inundado, hay más agua dentro que afuera”. La escasez de electricidad, agua potable y combustible agrava las condiciones de vida en la zona.
El medio local Primada Visión informó que hasta las 7:00 AM se habían acumulado 128,8 milímetros de lluvia en solo seis horas, afectando gravemente áreas como las calles Libertad y 1, así como comunidades como La Playa y El Matadero. La situación es alarmante, con el riesgo de nuevos deslaves e inundaciones en áreas vulnerables.
Las autoridades locales han enfatizado la necesidad de seguir las recomendaciones de emergencia y buscar refugio en lugares seguros. La falta de recursos y la desinformación complican aún más la situación en el Oriente de Cuba, donde los apagones constantes impiden a los residentes mantenerse informados a través de la radio y la televisión.