La reciente disputa entre la Unión Nacional Eléctrica (UNE) y el Ministerio de Energía y Minas (MINEM) ha dejado al descubierto una preocupante falta de coordinación en la gestión de la crisis energética que vive Cuba. Las declaraciones contradictorias emitidas por ambas instituciones en redes sociales han generado una ola de incertidumbre entre los ciudadanos, quienes se enfrentan a constantes apagones sin saber a ciencia cierta cuándo volverá la electricidad a sus hogares.
Todo comenzó este jueves, cuando la UNE utilizó su cuenta oficial de Facebook para desmentir rumores que circulaban sobre un supuesto corte masivo de electricidad programado para el fin de semana. En su comunicado, aseguraron que no había interrupciones previstas y que se estaban haciendo todos los esfuerzos posibles para mejorar el suministro eléctrico a nivel nacional. El mensaje fue recibido con un suspiro de alivio por parte de una población ya agotada por la prolongada crisis.
Sin embargo, ese respiro duró poco. Apenas unas horas después, el Ministerio de Energía y Minas (MINEM) salió a contradecir públicamente a la UNE, utilizando su cuenta en la red social X (antes conocida como Twitter). En su publicación, advirtieron que las afectaciones programadas continuarían durante el fin de semana debido a un déficit de capacidad de generación. Este mensaje sembró nuevamente el caos entre los cubanos, quienes no sabían a cuál de las dos versiones atenerse.
La confusión que generaron estas declaraciones dispares solo ha agravado la tensión en un país donde los cortes de electricidad se han convertido en parte de la vida diaria. Los apagones, más que un problema técnico, son ahora un símbolo de la fragilidad de las instituciones y de la falta de coordinación entre ellas. Mientras UNE y MINEM se lanzan mensajes contradictorios, la ciudadanía sufre las consecuencias de una crisis que parece no tener fin.
Este choque de versiones se produce en un momento crítico, pues hace apenas unos días el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) lograba su primera sincronización tras un colapso masivo que dejó a gran parte del país a oscuras por más de tres días. Aunque el restablecimiento del servicio marcó un paso importante hacia la recuperación, los problemas no han desaparecido. Según declaraciones del director general de Electricidad del MINEM, Lázaro Guerra Hernández, a la Televisión Cubana, el sistema aún enfrenta un déficit de capacidad, lo que implica que las interrupciones en el servicio continuarán.
A pesar de los esfuerzos por normalizar la operación del sistema, la Empresa Eléctrica de La Habana anunció este jueves que se vería obligada a cortar el suministro eléctrico en dos bloques de la capital durante varias horas. Este hecho es una prueba más de que, aunque se han logrado avances, el suministro eléctrico sigue siendo precario y difícil de mantener de manera estable.
