El paso devastador del huracán Oscar por la provincia de Guantánamo ha dejado una estela de destrucción y desesperación. Los habitantes de esta región del oriente cubano viven una tragedia sin precedentes, ya que muchas familias enteras han sido reportadas como desaparecidas. Las brigadas de rescate trabajan sin descanso en los municipios de San Antonio del Sur e Imías, áreas gravemente afectadas por deslaves y crecidas de ríos y presas, según los testimonios de los residentes locales.
De acuerdo con los reportes de Martí Noticias, las autoridades cubanas han desplegado brigadas de rescate para localizar a las personas que fueron arrastradas por las aguas. Los deslaves de lodo y el desbordamiento de las presas han dejado incomunicadas varias comunidades, lo que ha dificultado las tareas de rescate. San Antonio del Sur e Imías, en particular, son las zonas más afectadas, y se teme que haya familias atrapadas bajo el lodo o desaparecidas en medio del caos provocado por el huracán.
El activista Emilio Almaguer, desde la ciudad de Baracoa, dio un desgarrador reporte a través de Martí Noticias, en el que describió el colapso del puente de Cajobabo, una infraestructura clave para la conexión entre comunidades. “Es imposible llegar a Imías y San Antonio. La situación es crítica, el río ha invadido todo el terreno”, afirmó Almaguer, describiendo la magnitud del desastre. Las autoridades han advertido que podría llevar días restablecer la comunicación con estas localidades.
Mientras los rescatistas continúan la búsqueda, la situación para los sobrevivientes no es menos desoladora. La falta de electricidad, alimentos y agua potable agrava aún más el panorama. Las familias que lograron sobrevivir enfrentan ahora una crisis humanitaria. Algunos activistas y residentes denuncian que la ayuda no llega con la rapidez necesaria y que las personas en estas zonas están prácticamente abandonadas a su suerte.
Yamilka Lafita, una activista que se encuentra en La Habana, compartió su angustia al no tener noticias de su hermano y sobrino, desaparecidos desde el domingo. Según su testimonio, ambos estaban ayudando a sus vecinos a escapar cuando las aguas los arrastraron. “Nadie fue a socorrerlos en el momento crítico”, lamentó entre lágrimas, destacando la frustración y el dolor que viven muchas familias en situaciones similares.
En Guantánamo, el activista Miguel Ángel López Herrera confirmó que helicópteros militares están sobrevolando la región, pero hasta el momento no se ha dado una cifra oficial de desaparecidos. Lo que sí se ha informado es que el número de víctimas mortales ya asciende a siete, y las autoridades continúan evaluando los daños causados por el huracán.
El paso del huracán Oscar ha dejado una profunda huella en las zonas más vulnerables del oriente cubano. Familias enteras siguen desaparecidas, mientras que la búsqueda de sobrevivientes continúa en medio de condiciones extremadamente difíciles. La tragedia que se vive en Guantánamo ha expuesto una vez más la fragilidad de estas comunidades frente a los desastres naturales y la lenta respuesta de las autoridades ante una crisis de esta magnitud.
