Este fin de semana, usuarios en redes sociales denunciaron un nuevo cambio en el límite de extracción de efectivo en moneda nacional en los bancos cubanos, particularmente en el Banco Metropolitano de La Habana. La noticia ha generado una mezcla de frustración e indignación entre los cubanos, quienes ya enfrentan serios problemas para acceder a su dinero en efectivo, una situación que parece empeorar con estas nuevas regulaciones.
La usuaria Arlene Gómez, a través de su cuenta en la red social X, comentó sobre la odisea que viven los cubanos cuando intentan retirar dinero de los cajeros automáticos o directamente en los bancos. Según Gómez, la situación es crítica, ya que los cajeros automáticos en Cuba rara vez tienen efectivo o están funcionando correctamente, y los bancos están imponiendo reglas arbitrarias para la entrega de billetes, sin ofrecer explicaciones claras a los clientes.
Límite de extracción de 10 mil CUP… pero solo en billetes de 10 y 20
Gómez relató que, hasta hace una semana, el límite de extracción en los bancos cubanos era de 5000 CUP. Sin embargo, cuando acudió al Banco Metropolitano de Línea y M, en La Habana, con la esperanza de sacar más dinero, se encontró con una nueva regla que, aunque aparentemente era un cambio positivo, terminó siendo completamente inútil.
En teoría, el nuevo límite de extracción era de 10 mil CUP, pero el problema surgió cuando la cajera del banco le informó que solo podía retirar el dinero en billetes de 10 y 20 pesos. Gómez describió su frustración al imaginarse cómo llevar una suma de dinero significativa en billetes tan pequeños, en un contexto donde la inflación galopante ha hecho que esas denominaciones sean prácticamente inútiles para cubrir los gastos diarios.
«Me sentí impotente ante un sistema ineficaz»
El malestar de la usuaria aumentó cuando notó que la cajera tenía disponible billetes de otras denominaciones, pero se negó a entregarlos. La única explicación que recibió fue un vago «es lo que puedes sacar». Ante la falta de una justificación clara, Gómez pidió hablar con la directora del banco, lo que solo empeoró la situación, ya que la hicieron esperar sin ofrecer una respuesta concreta. Finalmente, decidió marcharse sin obtener una solución, pero no sin antes desahogarse escribiendo sobre su experiencia.
Gómez señaló que este tipo de situaciones no solo son comunes, sino que reflejan la ineficiencia y desidia de los organismos estatales en Cuba. «Es frustrante tener que lidiar con estas reglas absurdas que claramente no están pensadas en el bienestar de los ciudadanos. Todo esto es una falta de respeto al cliente y solo refleja el estado caótico en el que vivimos», expresó.
Un sistema bancario que refleja la crisis del país
La denuncia de Gómez en redes sociales resuena con muchos otros cubanos que viven día a día las dificultades de un sistema bancario que parece más enfocado en poner obstáculos que en facilitar el acceso al dinero. La escasez de efectivo, la falta de billetes de alta denominación y las largas filas para retirar pequeñas sumas son solo algunos de los problemas que agravan la crisis económica en la isla.
Al final, Gómez resume su experiencia con un toque de resignación: «Nada de esto me sorprende. Así es la vida en el país de la ziguaraya. Nos acostumbramos a los apagones, el maltrato institucional y la escasez desde el momento en que abrimos los ojos». Una frase que refleja el sentir de muchos en Cuba, que ven cómo las instituciones siguen fallando en ofrecer soluciones efectivas a problemas básicos.
