¡Indignación total! Héctor Villar enseña cómo comprar un Mercedes en Cuba mientras el pueblo pasa hambre

Redacción

En un país donde la crisis económica y la escasez golpean a diario, el periodista deportivo Héctor Villar ha encendido la furia en redes sociales. Todo comenzó cuando compartió un video en su cuenta de Instagram mostrando cómo adquirir un Mercedes Benz en Cuba, lo que desató una avalancha de comentarios negativos por parte de cubanos tanto dentro como fuera de la isla.

Un contraste doloroso: lujo en medio de la crisis cubana

En el polémico video, Héctor Villar aparece en un tono festivo, entrevistando al gerente de operaciones de Mercedes Benz en Cuba, Alberto Ramos. Durante la entrevista, Ramos detalla las opciones de leasing (alquiler con derecho a compra), con mensualidades asequibles, según sus palabras, al igual que ocurre en “el resto del mundo”. Sin embargo, el contraste entre la publicidad de vehículos de lujo y la realidad económica de Cuba fue demasiado para los espectadores, quienes no tardaron en expresar su indignación.

«El pueblo no tiene ni para desayunar, y tú hablando de Mercedes»

Uno de los comentarios que resonó con más fuerza fue el de un usuario que afirmó: “Acabo de ver esto y no sé ni qué decir, sin palabras, un pueblo que no tiene ni para desayunar en las mañanas”. Las críticas continuaron con mensajes de personas que cuestionaban cómo es posible que se promocionen autos de lujo en un país donde la mayoría de los cubanos no pueden costear ni lo más básico, como alimentos o medicinas.

La jugada perfecta de Villar: propaganda que duele

Este video ha sido catalogado por muchos como una «jugada perfecta» de mal gusto, una muestra más de cómo algunas figuras públicas se desconectan por completo de la realidad del cubano de a pie. Las reacciones negativas abundaron, con internautas acusando a Villar de frivolidad y desvergüenza por promocionar algo tan inalcanzable para el pueblo cubano. “¿Mercedes? Si ni para la comida alcanza”, reclamaba otro comentario, reflejando la frustración generalizada.

Mercedes Benz en Cuba: un lujo imposible

Además de la publicidad en sí, la conversación se expandió hacia las dificultades económicas de la isla. Muchos usuarios señalaron que la mayoría de los cubanos no tiene ni para pagar una bicicleta eléctrica, mucho menos para un Mercedes Benz. Algunos expresaron que el video era una burla para los 11 millones de cubanos que enfrentan una crisis diaria de supervivencia. “Las mensualidades de 3,000 o 4,000 dólares, qué locura”, mencionó un cubano emigrado, resaltando lo absurdo de la propuesta en el contexto cubano.

Críticas que reflejan la desesperanza del pueblo

El rechazo fue masivo, con mensajes cada vez más duros. “Pena le debería dar grabar eso. Ahora ve y camina por La Habana, enseña los basureros, la miseria”, exclamó un usuario. Otros acusaron a Héctor Villar de ser cómplice de un intento por “lavar la cara del gobierno” y crear una realidad alterna que no refleja las verdaderas necesidades del pueblo. Para muchos, el periodista simplemente está ayudando a construir una narrativa que solo beneficia a unos pocos, mientras el resto de la población lucha día a día por sobrevivir.

La nueva ley y el acceso a los vehículos de lujo: una falsa esperanza

Durante el video, se mencionó que a partir de octubre las personas naturales podrán acceder a la compra de vehículos como parte de nuevas leyes en el país. No obstante, para la mayoría de los cubanos, esto sigue siendo un sueño lejano. Las críticas también apuntaron hacia el régimen cubano y los altos precios de importación de vehículos, que resultan inaccesibles para trabajadores profesionales en la isla.

El costo de la desconexión: Héctor Villar y la realidad cubana

El caso de Héctor Villar muestra, una vez más, la creciente desconexión entre algunas figuras públicas y la realidad que vive la gran mayoría del pueblo cubano. Mientras el video pretende mostrar una Cuba con acceso a lujos como los autos de alta gama, la vida diaria en la isla continúa marcada por la pobreza y la lucha constante por los recursos básicos. Y aunque Villar intente defender su colaboración con Mercedes Benz, lo cierto es que su «jugada perfecta» ha dejado una amarga sensación de indignación entre sus seguidores.