El régimen cubano lanzará en octubre un modelo experimental para la siembra de arroz en varias provincias, en colaboración con Vietnam, que ha sido un donante frecuente de este grano a la Isla, a pesar de los intentos fallidos del gobierno por alcanzar la «soberanía alimentaria».
Según un reporte de Cubadebate, esta iniciativa forma parte de un proyecto de inversión con el Grupo Agroforestal de Mayabeque, comenzando en la Finca Pellejero, en Güines. Se emplearán semillas híbridas importadas de Vietnam.
Nguyen Thi Thom, directora de la empresa vietnamita Agri Vma, anunció que en esta primera fase se cosecharán 1,500 hectáreas con un rendimiento promedio esperado de siete toneladas por hectárea. Este modelo experimental tiene como objetivo aumentar la producción agrícola y mejorar el rendimiento de tierras cubanas que están subutilizadas.
Thi Thom también indicó que tras la cosecha, se llevará a cabo un intercambio sobre las técnicas agrícolas utilizadas y se proporcionará atención técnica para asegurar el éxito del cultivo. William Nieblas Rivas, productor de la finca, señaló que en una prueba inicial, la semilla híbrida se adaptó bien al suelo cubano.
Asimismo, se anunció que para la próxima campaña de frío en noviembre se prevé el cultivo de más de 15,000 hectáreas en diversas regiones de Cuba, destinadas al consumo nacional. El arroz es un alimento básico en la dieta cubana, aunque su escasez ha aumentado y su precio ha subido debido a la inflación y la crisis económica.
Este miércoles, se informó sobre la donación de más de 146 toneladas de alimentos por parte del gobierno de Argelia al régimen cubano, en un esfuerzo por aliviar «la difícil situación financiera». La vicetitular del Ministerio de Comercio Exterior, Déborah Rivas Saavedra, agradeció esta «importante donación», que incluye arroz, aceite, pastas y otros productos esenciales para la alimentación de la población.
A pesar de la asistencia internacional, la crisis en Cuba continúa. Un reciente informe del Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) reveló que la crisis alimentaria es considerada el principal problema social, con un 72% de los encuestados así lo afirmando. Además, siete de cada diez cubanos han dejado de realizar al menos una comida diaria por falta de recursos, mientras que solo el 15% puede hacer las tres comidas sin interrupciones.
