En medio de la crisis económica que atraviesa Cuba, el Banco Metropolitano de La Habana ha emitido un comunicado para aclarar su política respecto a la extracción de divisas. Esta respuesta surgió luego de que un usuario expresara su preocupación sobre la posibilidad de retirar su dinero en moneda extranjera de los bancos cubanos. La discusión tomó relevancia tras una publicación en el medio estatal Cubadebate, donde se abordaron temas relacionados con el sistema bancario del país durante una reciente Mesa Redonda.
El usuario, identificado como “Obeso”, fue quien encendió la chispa del debate. En su comentario, desaconsejó guardar dinero en divisa en los bancos cubanos, alegando que, en las condiciones actuales, ese sería un grave error. Según él, después de varios meses de espera, finalmente fue citado para cobrar su salario en dólares, producto de su trabajo en una Empresa Mixta en el extranjero. Su testimonio refleja el malestar creciente entre los cubanos que intentan acceder a sus ahorros en moneda dura, pero se enfrentan a múltiples obstáculos.
En respuesta a esta preocupación, el Banco Metropolitano explicó que la complicada situación económica del país ha forzado a las instituciones bancarias a implementar medidas especiales para la extracción de efectivo en moneda extranjera. La entidad aclaró que es necesario realizar una reservación antes de intentar retirar divisas. Esto, según ellos, permite a la sucursal gestionar el monto solicitado con antelación, un mecanismo similar al que se utiliza en otros países, aunque en Cuba la disponibilidad de divisas es mucho más limitada.
Escasez de efectivo y tiempos de espera prolongados
El Banco Metropolitano también reconoció que, debido a la baja disponibilidad de efectivo en moneda extranjera, los tiempos de respuesta pueden extenderse. Sin embargo, recalcaron que las solicitudes se atienden por orden de llegada. En el caso de “Obeso”, indicaron que su operación se llevó a cabo cuando el banco finalmente tuvo suficiente efectivo disponible. Este proceso, que en teoría suena sencillo, ha generado una profunda frustración entre los cubanos, quienes ven cómo sus ahorros quedan atrapados en un limbo burocrático sin soluciones claras.
Uno de los casos más llamativos fue el de la usuaria Odalis Fernández, quien compartió su experiencia sobre la dificultad de retirar el salario en dólares de su esposo, un Marino Mercante. Tras recibir el salario en divisas, tuvo que esperar un mes y medio y visitar tres bancos distintos para lograr retirar el dinero. Su relato refleja la realidad de muchos cubanos, quienes deben recorrer largas distancias y esperar semanas para acceder a sus propios fondos. Además, mencionó que su esposo lleva ya cuatro meses sin poder cobrar en dólares, lo que demuestra la gravedad de la situación.
Los colaboradores cubanos también alzan la voz
El debate en Cubadebate no se limitó a los usuarios regulares. Los colaboradores cubanos con certificados en divisa también aprovecharon la oportunidad para expresar su preocupación por las deudas pendientes en dólares que el Estado aún no ha saldado. Un colaborador, identificado como “JARA”, preguntó directamente si existía alguna solución prevista para esta situación, ya que muchos de ellos dependen de estos pagos para mantener a sus familias.
En respuesta, representantes del Banco de Crédito y Comercio (Bandec) admitieron las dificultades económicas que atraviesa el país y explicaron que la solución a largo plazo depende de un aumento en las exportaciones y en la producción interna. Sin embargo, esta respuesta no ofrece un alivio inmediato para quienes ya llevan meses esperando recibir su salario en divisas. La incertidumbre sigue siendo la constante en un sistema bancario cada vez más limitado por la escasez de efectivo.
¿Qué significa esto para los cubanos?
Este escenario plantea una pregunta importante para los cubanos: ¿es seguro guardar dinero en divisas en los bancos del país? Con la necesidad de hacer reservaciones, largos tiempos de espera y la limitada disponibilidad de dólares, muchos podrían reconsiderar sus opciones. Mientras el gobierno intenta estabilizar la economía, la realidad es que para muchos ciudadanos, acceder a su propio dinero se ha convertido en una odisea que parece no tener fin.
La situación expuesta por el Banco Metropolitano y los testimonios de los ciudadanos ponen de manifiesto la difícil situación financiera que enfrenta Cuba, donde las soluciones parecen estar cada vez más fuera del alcance de la población.
