La llegada de la influencer cubana Flor de Cuba a Miami ha desatado una oleada de críticas, especialmente por una foto que en su momento se tomó con Sandro Castro, el nieto del fallecido dictador Fidel Castro. Esta imagen ha sido un tema recurrente de discusión, especialmente en medios de exiliados cubanos. Entre los principales críticos se encuentra el conocido presentador Alexander Otaola, quien ha señalado varias veces los posibles vínculos entre Flor de Cuba y la familia Castro.
Durante su primera entrevista en Miami, realizada en el podcast “Destino Tolk” —con el que acaba de firmar un contrato—, Flor de Cuba decidió aclarar la polémica que ha circulado en redes sociales y medios de comunicación. “Esa foto fue simplemente porque Sandro me contrató para organizar un desfile a través de mi agencia. Hicimos el evento por un solo día, nos hicimos la foto como parte de la publicidad del desfile y eso fue todo. Ese es el único vínculo que he tenido con Sandro en toda mi vida”, aseguró la influencer, buscando poner fin a las especulaciones.
Flor de Cuba explicó que durante el evento tuvieron una breve interacción, pero que todo fue de manera profesional. “Ese día lo conocí, compartimos, pero fue algo completamente profesional. Es un muchacho muy educado, amable, y hasta ahí. No hay más. El que de verdad tiene vínculos con el régimen no anda subiendo fotos, el que tiene algo que esconder no lo haría tan público”, afirmó, buscando desmentir los rumores que la vinculan con la familia Castro de manera más profunda.
Las especulaciones no se detuvieron ahí. Otaola, en varias ocasiones, ha lanzado teorías, llegando incluso a afirmar que Sandro Castro podría ser el padre del hijo pequeño de Flor de Cuba. Ante estas declaraciones, la influencer no se quedó callada. “Esas son las historias que se inventa Otaola. Ha llegado a decir que Sandro es el padre de mi hijo, algo completamente falso”, comentó durante la entrevista, visiblemente molesta por las acusaciones sin fundamento.
En cuanto a las críticas que ha recibido desde el exilio, donde algunos la han tildado de «chivata» o han insinuado que tiene vínculos con la dictadura cubana, Flor de Cuba fue contundente en su respuesta. “Nunca he visto a nadie que trabaje para el Estado cubano viviendo como yo. Al contrario, creo que las personas que más lealtad tienen al sistema son las que más necesidades pasan. No tengo vínculos con el régimen, y siempre se dice lo mismo sobre cualquier cubano que llega a Miami. A la gente le cuesta entender que, en las mismas condiciones, pude hacer algo diferente”, dijo con firmeza.
A pesar de las aclaraciones de Flor de Cuba, Otaola continúa sosteniendo sus sospechas. Aunque admite no tener pruebas concretas, asegura que para él, Flor de Cuba es la testaferro de Sandro Castro. Esta afirmación sigue generando controversia en la comunidad cubana en el exilio, y es probable que el debate sobre los verdaderos vínculos de Flor de Cuba con la familia Castro siga en el aire por algún tiempo más.
Con su llegada a Miami y su nueva plataforma en “Destino Tolk”, Flor de Cuba parece decidida a continuar su carrera en el mundo del entretenimiento, dejando atrás las especulaciones y buscando construir una nueva etapa profesional. Sin embargo, las preguntas sobre su pasado y sus supuestos vínculos seguirán siendo un tema recurrente en la esfera pública.
