El Meliá Internacional de Varadero es conocido como uno de los hoteles más lujosos y caros de Cuba, un destino paradisíaco reservado para aquellos que pueden permitirse pagar hasta 460 dólares por noche. Sin embargo, para los cubanos, este hotel representa mucho más que un simple alojamiento de lujo. La desconexión entre el trato exclusivo que reciben los turistas y la realidad diaria de la mayoría de los cubanos es un reflejo de las profundas desigualdades que existen en el país.
Recientemente, los youtubers cubanos Javi y Zami, quienes se han hecho populares en YouTube por compartir sus experiencias de vida y viajes, decidieron pasar tres días en el Meliá Internacional para comprobar si el precio exorbitante de la sección VIP, llamada The Level, justificaba realmente las instalaciones y los servicios ofrecidos. Esta sección, exclusiva para adultos, promete una experiencia de lujo con áreas privadas, piscinas más tranquilas y restaurantes exclusivos. La pregunta es, ¿realmente vale la pena?
La pareja se hospedó en una Junior Suite Vistamar, cuya tarifa es casi el doble de una habitación estándar. Según los youtubers, las instalaciones de la suite eran lujosas: un minibar bien surtido, una espaciosa bañera y duchas independientes que cumplían con las expectativas de un hotel de alto nivel. Además, los huéspedes de The Level tienen acceso a áreas exclusivas en la playa, con duchas y sombrillas especiales, un toque de comodidad que se espera en este tipo de resorts.
Sin embargo, no todo fue perfecto. Aunque Javi y Zami disfrutaron de la calidad superior de los desayunos en el restaurante exclusivo Mosaico, donde destacaron opciones como los huevos benedictinos y crepes, también señalaron ciertas inconsistencias. En el restaurante japonés Sasa Tanaki, los sushis no estuvieron a la altura de lo que se esperaría en un hotel de lujo, algo que resultó decepcionante para los youtubers.
Uno de los aspectos más criticados por la pareja fue el tiempo de espera en el restaurante italiano Casa Nostra, donde tardaron más de 40 minutos en ser atendidos. Esto afectó significativamente su experiencia, ya que uno esperaría un servicio eficiente en un lugar de esta categoría. Además, otro factor que les causó molestia fue la falta de cervezas cubanas como la Cristal, lo que les resultó sorprendente para un hotel de lujo en Cuba, donde solo ofrecían marcas internacionales o de baja calidad.
A pesar de estos inconvenientes, los youtubers también destacaron algunos aspectos positivos de su estancia. El circuito hidrotermal del spa, que incluye piscinas de agua caliente y fría, saunas y jacuzzis, fue una de las experiencias más relajantes que disfrutaron. Este servicio, valorado en 30 dólares, era gratuito para los huéspedes VIP, lo que añadió un toque de exclusividad a su visita.
Sin embargo, el contraste entre la opulencia del Meliá Internacional y la realidad económica de la mayoría de los cubanos fue un tema recurrente en los comentarios del video que Javi y Zami compartieron en su canal. Muchos espectadores expresaron su sorpresa e indignación ante la abundancia de comida y lujo mostrados en el hotel, mientras que en el resto del país conseguir alimentos básicos es una lucha diaria. Un comentario destacado señalaba que ver tanta comida junta en un solo lugar le hizo llorar, reflejando el dolor de vivir en un país donde esos privilegios están reservados para unos pocos.
Este contraste entre los recursos disponibles para los turistas y la escasez generalizada para los cubanos es una paradoja evidente. Para muchos, es un recordatorio de la desigualdad que prevalece en la isla, donde el turismo internacional se prioriza por encima del bienestar de la población local. Mientras los turistas disfrutan de lujos inimaginables, los cubanos continúan enfrentando la dura realidad de la falta de productos básicos, algo que genera un profundo resentimiento y descontento.