Régimen cubano da marcha atrás y anuncia que no se prohibirá el “paquete semanal” ni el llenado de memorias o venta de discos quemados

Redacción

El Paquete Semanal también sube de precio y ahora los cubanos tendrán que pagar más por ver series y películas pirateadas

El régimen cubano ha desmentido los rumores sobre la supuesta prohibición del Paquete Semanal. Esta especulación surgió tras la publicación del Decreto 107 del Consejo de Ministros, que restringe la exhibición cinematográfica de películas, series, documentales y novelas a través de medios digitales.

Ernesto Vila González, director del Centro Nacional de Derecho de Autor y del Artista Intérprete, aclaró a Cubadebate que la nueva normativa no impide la difusión del Paquete Semanal. “Las regulaciones se refieren a la exhibición cinematográfica en un espacio público, y lo que implica la actualización es que no se permite hacerlo en medios digitales a través de soportes informáticos,” explicó.

Vila González precisó que la copia de discos duros o memorias para uso cultural personal o familiar se considera una reproducción, no una exhibición. En cuanto a las actividades privadas, mencionó que la venta de discos, que ha migrado a formatos como el USB, sigue permitida bajo ciertas condiciones.

“Quienes cuenten con la licencia de autorización, lo pueden seguir haciendo, siempre y cuando cumplan con los requisitos que la propia norma instrumenta,” añadió. Entre estos requisitos se encuentra estar contratado con la Agencia de Creadores Dramáticos, Musicales y Audiovisuales (ACDAM).

La ACDAM se encarga de remunerar a los creadores cuyos materiales se intercambian. “Los TCP hacen un pago mensual para la remuneración a los creadores que están incluidos en esos materiales que se intercambian. Esta agencia cuenta con una red territorial que alcanza todo el país,” destacó Vila González.

No obstante, la ACDAM no es un requisito para el intercambio sin fines de lucro de materiales audiovisuales mediante memorias y otros dispositivos informáticos entre personas, aclaró el funcionario.

Vila González concluyó que “las nuevas normativas no prohíben la circulación de material audiovisual ni el ejercicio de esta actividad por cuenta propia, siempre y cuando quienes la ejercen cuenten con el autorizo y cumplan con lo establecido en la Ley de los Derechos del Autor y del Artista Intérprete.”

Sin embargo, esta perspectiva enfrenta críticas debido a la naturaleza ilegal del contenido distribuido en el Paquete Semanal, que incluye películas y series de plataformas y canales sin autorización.

La controversia se intensificó después de que el régimen publicara un listado con 125 actividades económicas prohibidas para las formas económicas no estatales, lo que generó confusión sobre la legalidad del Paquete Semanal. El Periódico 26 de Las Tunas consultó a especialistas de la Dirección Municipal de Trabajo, quienes aclararon que “se exceptúan de la prohibición las licencias para vendedores de discos ya aprobadas.”

No obstante, se anunció que “no se emitirán nuevas licencias para vendedores de discos.” Aunque el Periódico 26 eliminó la publicación de sus redes sociales, Raudel Rodríguez, periodista de Radio Victoria, reprodujo el texto en su muro de Facebook, afirmando: “Se mantiene el paquete. Lo que no se autorizarán nuevas licencias para vendedores de discos (en este caso los que realizan grabaciones de materiales audiovisuales).”

El humorista Ulises Toirac también se unió a las críticas, diciendo: “Hagan buena televisión y punto. Se mueren de hambre los ‘paqueteros’. ¿Y qué venden ellos? No lo que ellos quieren, venden lo que le piden. ¿Que es de mala calidad cultural? Pregúntense a qué obedece.”

El año pasado, el presidente Miguel Díaz-Canel expresó su preocupación por el contenido del Paquete Semanal, sugiriendo que se incluyeran más producciones nacionales. “No es solo el tema de ‘los teléfonos’, podría haber más preocupaciones, todo lo que nos llega por el paquete, por una película, y ¿vamos a dejar de ver película, vamos a dejar de usar el teléfono?” preguntó Díaz-Canel en un encuentro con parlamentarios cubanos.