El régimen cubano ha anunciado que a partir del viernes 13 de septiembre, el tamaño del pan de la canasta básica se reducirá a 60 gramos. Esta medida responde a la escasez de harina de trigo, que ha llevado a una disminución del gramaje del pan de los 80 gramos anteriores. El precio del pan también se ajustará, bajando de un peso a 75 centavos.
Anayra Cabrera Martínez, directora general de política industrial del Ministerio de la Industria Alimentaria (MINAL), explicó que esta reducción es necesaria para garantizar que el pan esté disponible diariamente para la población y evitar las interrupciones que se produjeron en meses anteriores debido a la falta de harina.
Cabrera Martínez advirtió que podrían surgir atrasos en la distribución del pan, ya que el transporte diario de harina a los destinos requiere una compleja logística. No obstante, aseguró que esta medida es temporal y no tiene como objetivo afectar la producción, sino asegurar que el pan llegue a la población y a los centros de consumo social.
La directora también subrayó que la disminución en el gramaje no debería afectar la calidad del producto. Se implementarán controles más estrictos sobre los panaderos para garantizar que se mantengan las normas establecidas. Para mantener la producción del pan de la cuota, se requieren diariamente 700 toneladas de harina de trigo.
Además, se informó en la rueda de prensa que la Cadena Cubana del Pan continuará con la venta de pan liberado, colaborando con las formas de gestión no estatal para asegurar el suministro.
