El pasado miércoles, un santiaguero fue visto paseando un cerdo por las calles del centro histórico de Santiago de Cuba, en una imagen que rápidamente se hizo viral en redes sociales. En medio de la severa crisis alimentaria que afecta a la Isla, donde el precio de la carne de cerdo se ha disparado, la escena causó revuelo, desatando comentarios que resaltan la envidia de muchos al ver a alguien con semejante “suerte”.
La imagen fue compartida en Facebook por Yayu López, quien no dudó en acompañarla con un comentario que resumía la ironía de la situación: “Cuando sacas a pasear la mascota con toda la actitud orgullosa de que muchos quisieran ser tú”. En el contexto actual de Santiago de Cuba, donde la libra de carne de cerdo cuesta 750 pesos, tener un cerdo es considerado un auténtico lujo para la mayoría de las personas, lo que explica la reacción ante esta escena.
Una realidad insostenible para los cubanos
El precio de la carne de cerdo ha alcanzado cifras alarmantes en toda Cuba, y Santiago no es la excepción. La foto tomada en la calle Barnada, en pleno centro de la ciudad, ilustra de manera simbólica la desesperada situación económica que viven los cubanos. En La Habana, el precio de la carne de cerdo alcanzó recientemente los 1,100 pesos por libra, lo que hace prácticamente imposible para muchas familias poder disfrutar de este alimento que tradicionalmente ha sido uno de los preferidos en la cocina cubana.
Este incremento de precios no es reciente. Durante el verano de 2023, el precio de la carne de cerdo era de 550 pesos por libra, lo que ya suponía un problema para muchas familias. Sin embargo, en tan solo un año, este precio ha llegado a duplicarse, poniendo en evidencia la profunda crisis económica que afecta al país. Alimentos como el lomo o la pierna de cerdo, que solían ser accesibles, ahora son un lujo que solo unos pocos pueden permitirse.
El costo de la carne y los salarios en Cuba
La situación se agrava aún más cuando se contrasta con los salarios en Cuba. Tras el llamado “ordenamiento económico”, el salario mínimo en la Isla quedó establecido en 2,100 pesos cubanos (CUP). Esto significa que un trabajador cubano que recibe el salario mínimo necesitaría destinar más de la mitad de su salario mensual para comprar apenas tres libras de carne de cerdo, lo que convierte este alimento en un artículo casi prohibitivo para la mayoría de las familias.
Los comentarios en la publicación de Yayu López reflejan esta cruda realidad, donde muchas personas se ven obligadas a renunciar a productos básicos debido a los precios desorbitados. La masa y el bistec de cerdo, por ejemplo, ya se cotizan a 1,150 pesos por libra, mientras que el lomo y la pierna alcanzan los 780 pesos por libra, lo que pone en evidencia la magnitud del problema.
Una imagen que refleja la desigualdad
La imagen de un hombre paseando un cerdo por las calles de Santiago de Cuba es mucho más que una curiosidad; es un reflejo de la profunda desigualdad y las dificultades que enfrentan los cubanos en su vida diaria. En una ciudad donde la mayoría de las personas lucha por acceder a productos básicos, la simple posesión de un cerdo se ha convertido en un símbolo de privilegio, algo impensable en otros tiempos.
El elevado costo de la carne de cerdo y otros alimentos pone de manifiesto los efectos de la inflación y las dificultades que enfrenta el país para satisfacer las necesidades de su población. Esta escena, que a primera vista podría parecer cómica, es en realidad una muestra del descontento y la frustración que muchos cubanos sienten ante la situación económica y social que atraviesa la Isla.
