En el poblado de El Cristo, en Santiago de Cuba, ha surgido una nueva denuncia sobre la venta irregular de gas licuado, un servicio ya conocido por su alto costo e ineficiencia en el país. El periodista independiente Yosmany Mayeta reveló en su perfil de Facebook que en el punto de venta local se están despachando solo 50 balitas de gas, a pesar de recibir un lote mayor.
Los residentes acusan a los trabajadores del punto de venta de desviar los balones de gas hacia el mercado negro, una práctica que no solo causa indignación, sino que también agrava la crisis de quienes dependen de este combustible para cocinar. «Es abusivo lo que pasa aquí. Llegan 200 balitas y se acaban con 50 personas. Lo peor es que las venden por la izquierda a 2,500 pesos», comentó una de las denunciantes.
A pesar de que las autoridades locales están al tanto de la situación, no se han tomado medidas para resolver el problema. Este tipo de irregularidades son frecuentes en la zona y contribuyen a la creciente insatisfacción de los residentes.
La situación se ve empeorada por el reciente aumento en el precio de las balitas de gas, anunciado por el gobierno cubano en enero. Desde el 1 de marzo, el costo de una balita de gas de 20 libras pasó de 180 CUP a 225 CUP, lo que representa un incremento del 20%. Este aumento ha hecho que el servicio sea aún más inaccesible para muchos cubanos, exacerbando el problema de la corrupción en los puntos de venta.
El desvío de balitas de gas para su venta en el mercado negro no se limita a El Cristo; también ocurre en otros puntos de Santiago de Cuba. Los vecinos han hecho un llamado urgente a las autoridades para que tomen medidas contra estas prácticas corruptas que afectan la ya precaria calidad de vida en la isla.
