Más de cinco años después del crimen, esta semana comenzó el juicio de Zadiel Rivero y Zandy de la Osa, dos hermanos cubanos acusados de asesinar a puñaladas a un hombre en Hialeah Gardens.
El asesinato ocurrió la noche del 11 de febrero de 2019 en el estacionamiento de una casa en la cuadra 8900 de Northwest 112th Terrace. En ese momento, Zadiel Rivero, de 38 años, tuvo una violenta confrontación con la víctima, Frank Canet.
Imágenes de una cámara de seguridad mostraron que durante la discusión, Rivero apuñaló a Canet en el torso con un cuchillo de cocina, infligiéndole al menos una veintena de heridas antes de lanzarlo al suelo. Zandy de la Osa, hermano de Rivero, colocó su pierna izquierda y un tubo de metal sobre el cuerpo de la víctima para evitar que se levantara.
Cuando Canet logró escapar y subirse a su vehículo, Rivero comenzó a perseguirlo. La novia de la víctima, Dilaxy Madruga, quien entonces tenía 18 años, intentó llamar a Emergencias, pero la llamada se cortó cuando Rivero le quitó el teléfono. A pesar de su esfuerzo, la pareja solo pudo llegar al Centro Mount Sinai Hialeah, donde Canet falleció.
Durante el juicio, que comenzó esta semana, los abogados defensores no negaron el asesinato, pero alegaron que se trató de un caso de defensa propia. Según Telemundo 51, que citó fuentes judiciales, argumentaron que la víctima estaba drogada y amenazó a Rivero. Jonathan Jordan, uno de los abogados defensores, afirmó que Canet estaba intoxicado con metanfetamina, lo que supuestamente le dio una fuerza sobrehumana.
“Mi cliente estaba ayudando a su hermano para evitar que un Superman intoxicado lo asesinara”, comentó Bruce Lehr, el otro abogado defensor.
El juicio sigue su curso. Sin embargo, para Zadiel Rivero, este no es el único caso pendiente en la corte, ya que también enfrenta cargos por abuso sexual de una niña, junto con su esposa.
