Ary Fonseca, conocida por su papel de madre dulce y abnegada en la telenovela El derecho de soñar, ha sorprendido a sus seguidores con su transformación en Renacer. En esta nueva producción, Fonseca encarna a Roxana, una villana compleja y fascinante que los espectadores adoran odiar.
La frase característica de su personaje, “ponte y piensa”, se ha vuelto un eslogan popular en los tres meses que Cubavisión ha transmitido la telenovela. Esta expresión, que ha capturado la atención de muchos cubanos dentro y fuera de la Isla, se ha convertido en un coloquialismo, similar a cómo Alejandro Socorro popularizó “salsa, manquito y cerveza” en ¡Oh La Habana!, o el “maximízame el baro” y “¡Te atreves tú!” de Blanca Rosa Blanco y Monste Duane en La cara oculta de la luna.
En una conversación con el periódico oficial Escambray, Fonseca compartió detalles sobre su experiencia en Renacer. Reveló: “Cuando comencé a leer el guion de Roxana, sentí un rechazo inicial hacia el personaje. Incluso se lo mencioné a la directora: ‘Voy por el capítulo X, y me está cayendo muy mal’. La respuesta de la directora fue clara: ‘Sí, pero a la única que no puede caerle mal es a ti’”.
Este consejo fue crucial para la actriz, quien comenzó a profundizar en el personaje para evitar caer en clichés. Explicó: “Es cierto, Roxana es una mala persona, pero me enfoqué en entender por qué es así. ¿Qué hay detrás de cada palabra o acción de ella? ¿Qué está pasando en su vida? Esto me permitió crear una historia y explorar sus sentimientos y motivaciones”.
Fonseca se describe a sí misma como una persona emprendedora y organizada, lo que contrasta con la naturaleza antagonista de su personaje. “Roxana y yo no tenemos nada en común. Aunque ambas somos presumidas y nos gusta estar siempre arregladas, nuestras vidas y posturas son muy diferentes”, comentó.
El rodaje de Renacer fue una experiencia única para Fonseca, muy distinta a su experiencia en El derecho de soñar, donde las grabaciones duraron solo una semana. “Llevar el personaje de Roxana durante seis meses fue intenso. Estuve en numerosas locaciones y eso significó muchos llamados. A veces, sentía que estaba viviendo como el personaje incluso fuera del trabajo”, compartió.
Fonseca también recordó momentos en los que, al conversar con amigos, se sentía como Roxana. “Concentrarse tanto en el papel hace que parte de ese personaje se quede dentro de uno”, comentó. A pesar de esto, la actriz expresó su satisfacción por el trabajo realizado. “Amé construir y vivir cada una de las emociones de Roxana. Es una persona con muchas altibajos y cálculos, una máquina de emociones”, añadió.
Renacer ha dejado una huella significativa en la vida y carrera de Fonseca. “Al finalizar el rodaje, solo se me ocurrió hacer un video llorando por la despedida. La nostalgia de saber que todo ha terminado es inevitable. Voy a extrañar a Roxana mucho”, confesó.
En el futuro, los seguidores de Fonseca podrán disfrutar de su trabajo en nuevos proyectos. Participará en Una calle y mil caminos, un telefilme con Alberto Luberta, donde asumirá otro personaje negativo, aunque diferente a Roxana. También ha trabajado en el teleplay Amistad funesta con Elena Palacio y en el cuento Edipo Rey con Hape, ambos aún sin fecha de estreno.
Además, Fonseca interpretará a Lisy en la serie Gatos, máscaras y sombras, que abordará la violencia de género y se estrenará en septiembre. “Este personaje es muy especial y diferente a todo lo que he hecho hasta ahora. Me generó una gran entrega emocional y espiritual”, explicó.
Finalmente, aquellos que disfruten del trabajo de Fonseca en Renacer podrán seguir viéndola en la próxima telenovela cubana Sábados de gloria, dirigida por Tamara Castellanos y Ernesto Fiallo. En esta nueva producción, que comenzará en enero, Fonseca interpretará a Paloma, “otro personaje muy bonito”. Hasta entonces, los seguidores aún pueden disfrutar de Roxana.
