Osmani García y La Diosa muestran cómo lucen tras el resultado de la queratopigmentación para cambiar el color de sus ojos a azul

Redacción

Artistas cubanos como La Diosa y Osmani García están llamando la atención con sus llamativos ojos azules, resultado de la queratopigmentación, una técnica cosmética avanzada que emplea láser para cambiar el color de los ojos.

Sin embargo, esta técnica, que transforma los ojos de marrón a azul, está generando inquietud en la comunidad oftalmológica internacional. La Sociedad Americana de Oftalmología ha expresado preocupación debido a los posibles riesgos y la falta de estudios definitivos que aseguren su seguridad.

El procedimiento, que se ofrece en algunos centros especializados, utiliza láser para eliminar las células que contienen el pigmento marrón en los ojos. La teoría es que, al eliminar estas células, el ojo debería adquirir un color azul debido a la ausencia de pigmentación. Sin embargo, los oftalmólogos están preocupados por el manejo de las células destruidas y su eliminación adecuada.

Uno de los riesgos es que las células muertas puedan no ser eliminadas correctamente y se acumulen en el ojo, lo que podría elevar la presión ocular y dar lugar a complicaciones graves como el glaucoma o la uveítis.

Además del uso estético, la queratopigmentación también ha sido empleada terapéuticamente en pacientes con fotofobia severa, aniridia o coloboma del iris, para reducir la dispersión de luz o mejorar la apariencia de leucomas. Sin embargo, su uso estético ha ganado popularidad desde 2010, y figuras públicas como La Diosa y Osmani García han contribuido a su difusión reciente en Cuba.

En Estados Unidos, el costo de la cirugía ronda los 12,000 dólares, con promociones que reducen el precio a 8,000 dólares. No obstante, el procedimiento conlleva posibles complicaciones, como sensibilidad a la luz, coloración irregular y defectos en el campo visual.

Un estudio de Alio et al., que evaluó 234 ojos de 204 pacientes, reveló que el 12.82% experimentó alguna complicación, siendo la sensibilidad a la luz la más frecuente.

Mientras se completan los ensayos clínicos y se confirma la seguridad del procedimiento, los expertos sugieren que quienes desean cambiar el color de sus ojos consideren alternativas menos invasivas, como los lentes de contacto cosméticos.