Helados CID, la verdad detrás de esta empresa privada que pertenece a los nietos de un militar de alto rango dentro del régimen cubano

Redacción

Los Hermanos García Cid, conocidos por su empresa de helados “Helados CiD”, han emergido como figuras prominentes en el ámbito de los negocios privados en Cuba. Su empresa ha logrado desplazar a la icónica “Helados Coppelia”, una de las principales compañías estatales del país. Pero, ¿qué hay detrás de este éxito aparentemente meteórico?

El Origen de “Helados CiD”

Yendri y Henry García Cid comenzaron su trayectoria empresarial en el contexto de las reformas económicas impulsadas por el régimen cubano para fomentar el emprendimiento privado. Estas reformas, conocidas como las MIPYMES, permitieron a los empresarios crear negocios privados con un mayor grado de autonomía.

En 2021, con un pequeño negocio dedicado a la producción y distribución de helados, leches saborizadas, yogures y otros derivados, los García Cid recibieron la visita del entonces ministro de Economía, Alejandro Gil. La visita resultó ser un punto de inflexión para el negocio familiar.

La Influencia del Gobierno

Durante su visita, Gil reconoció el potencial de la empresa de los García Cid y se lo comunicó al Primer Ministro Manuel Marrero. Marrero, junto a su hermana Tamara y su hijo Manolito, ha estado profundamente involucrado en el apoyo y financiamiento de negocios privados, lo que ha suscitado especulaciones sobre posibles beneficios y colaboraciones entre el gobierno y los emprendedores.

A partir de este momento, el sueño de Yendri y Henry de expandir su negocio de helados se materializó. Recibieron un flujo constante de financiamiento estatal, préstamos y donaciones de organizaciones internacionales dedicadas al desarrollo de pequeñas y medianas empresas. Este apoyo permitió a “Helados CiD” adquirir tecnología avanzada, maquinaria moderna, camiones refrigerados y nuevos locales.

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La Expansión y la Controversia

La expansión de “Helados CiD” no solo se limitó a la producción de helados. La empresa diversificó su oferta y comenzó a comercializar alimentos a través de internet, con opciones de pago desde Estados Unidos. Este crecimiento y éxito en un mercado competitivo ha levantado cejas y generado debates sobre el papel del favoritismo en el desarrollo empresarial en Cuba.

Como dice el refrán, “El que tiene padrino, se bautiza”. En este caso, la influencia de los García Cid y su relación con figuras clave del régimen parecen haber jugado un papel crucial en su ascenso.

La Realidad para la Mayoría de los Cubanos

Mientras “Helados CiD” florece, muchos cubanos enfrentan una realidad diferente. La promesa de un socialismo que se transforma cada vez más en una economía capitalista sigue siendo inalcanzable para la mayoría. La falta de oportunidades y recursos limita a aquellos que no tienen conexiones privilegiadas, como las que parecen haber beneficiado a los García Cid.