Los vecinos de La Habana han manifestado su preocupación por la alta probabilidad de inundaciones debido a las fuertes lluvias que azotan la ciudad desde el jueves. La situación se torna alarmante, pues aunque ha caído poca lluvia, las calles ya muestran signos de anegamiento.
Raúl Córdova, un residente de la capital cubana, compartió en Facebook su desconfianza en las afirmaciones de las autoridades sobre las acciones realizadas para prevenir inundaciones. Según Córdova, la realidad en las calles parece contradecir las estimaciones oficiales. En su publicación, subió fotos de la esquina de 5ta y calle 12, donde se observa una notable acumulación de agua tras solo unas pocas gotas de lluvia. «Después dicen que tomaron medidas limpiando tragantes y alcantarillas, ¿qué será cuando lleguen las fuertes lluvias como las de hace unos meses atrás?», comentó preocupado.
Las fuertes lluvias que afectaron a La Habana hace unos meses provocaron inundaciones significativas, causando daños materiales y dejando a varios residentes sin hogar. A pesar de los esfuerzos de las autoridades por mejorar la infraestructura de drenaje, los ciudadanos aún dudan de su eficacia. Los vecinos han instado a las autoridades a realizar una revisión exhaustiva y a tomar medidas más efectivas para asegurar que las alcantarillas y tragantes estén completamente operativos antes de que arrecien las lluvias.
La preocupación de los habaneros es comprensible, especialmente después de que el Centro Nacional de Huracanes (NHC) anunciara este sábado la formación de la cuarta depresión tropical de la temporada, ubicada sobre Cuba. La Depresión Tropical número cuatro se ha desarrollado rápidamente y se espera que cause condiciones climáticas adversas en la región, incluyendo la Isla de la Juventud.
Se pronostican condiciones de tormenta tropical con vientos sostenidos de hasta 35 mph (55 km/h) y ráfagas más fuertes. Además, se espera que la depresión produzca acumulaciones de lluvia de entre 6 a 10 pulgadas, con totales máximos de hasta 15 pulgadas en algunas áreas. Estas lluvias podrían causar inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra, especialmente en zonas montañosas y urbanas con problemas de drenaje.
Los habaneros esperan que estas preocupaciones sean atendidas de manera urgente para evitar que se repita la devastación de inundaciones anteriores. La infraestructura de drenaje de la ciudad debe ser capaz de soportar las inclemencias del tiempo y proteger a los residentes de los daños que pueden causar las inundaciones.
Es crucial que las autoridades tomen en serio las advertencias de los ciudadanos y trabajen para garantizar la seguridad y bienestar de todos. Con la temporada de lluvias en pleno apogeo y la amenaza de la Depresión Tropical número cuatro, el tiempo es esencial para implementar medidas efectivas que prevengan futuros desastres. Los vecinos de La Habana continúan vigilantes y esperan que se tomen las acciones necesarias para proteger sus hogares y sus vidas.