El Gobierno de Cuba ha realizado un total de 1.079 “acciones de control” para verificar la aplicación de los precios topados establecidos para la venta minorista de alimentos de alta demanda por las MIPYMES, de acuerdo con la Resolución 225/2024 del Ministerio de Finanzas y Precios (MFP). Estas inspecciones, llevadas a cabo en cuestión de horas, revelaron 393 violaciones, cuyos responsables fueron multados y advertidos, según informó el titular del MFP, Vladimir Regueiro Ale, citado por el portal oficial Cubadebate.
La información, que no especifica el monto de las multas, se divulgó tres días después de la entrada en vigor de la mencionada resolución. Regueiro Ale describió esta medida como “un primer paso hacia la contención de la inflación” durante el Noticiero de Televisión.
El propio miércoles, varios cubanos se quejaron de la desaparición de productos como el pollo y las salchichas de las estanterías de las MIPYMES, así como del aumento del precio del aceite. Estas quejas se presentaron en Cubadebate en respuesta a los primeros efectos de la Resolución 225/2024.
Esta norma, descrita como “una regulación temporal”, establece precios máximos para varios productos básicos: el pollo troceado a 680 pesos por kilogramo; aceites comestibles (excepto de oliva) a 990 pesos por litro; leche en polvo a 1.675 pesos por kilogramo; pastas alimenticias a 835 pesos por kilogramo; salchichas a 1.045 pesos por kilogramo; y detergente en polvo a 630 pesos por kilogramo.
Regueiro Ale reconoció que los precios continúan siendo altos, especialmente para la población con menores ingresos, como los jubilados y otras personas protegidas por la Seguridad Social. Incluso para muchos trabajadores, estos productos básicos siguen siendo prácticamente inalcanzables, dado que el salario estatal medio en Cuba es de 4.300 pesos y las pensiones 1.500 pesos, con un salario mínimo de 2.100 pesos.
El ministro señaló que los precios de estos productos han tenido un crecimiento sostenido en los últimos meses, y afirmó que “tras estudios realizados, y con la nueva resolución no puede continuar ocurriendo”. Además, precisó que estos precios no serán estáticos, lo que puede interpretarse como el anuncio de futuros ajustes en los topes de precios por parte del Gobierno cubano.
El ministro destacó la facultad de los gobiernos locales para establecer “precios límites en las ventas de las MIPYMES, trabajadores por cuenta propia y demás formas de gestión”, incluso por debajo de los fijados por la resolución. Donde los precios locales sean más bajos que los centralizados, no hay necesidad de aumentarlos, afirmó Regueiro Ale.
La resolución establece un margen de ganancia del 30% para todas las formas de gestión y representa un “sacrificio” del Gobierno de Cuba “desde el presupuesto del Estado” y una “renuncia de ingresos, con el objetivo de favorecer la reducción de los costos”. Las personas que importen esos seis productos están exoneradas del pago de aranceles en Aduana.
Regueiro Ale aseguró que la medida está vinculada a otras acciones o proyecciones que se implementarán próximamente y que permitirán crear un escenario con más producción y prestación de bienes y servicios.