La decisión de las autoridades del Ministerio de Industria Alimentaria (Minal) de Cuba de proporcionar un módulo de «sirope, galletas y sorbetos» a niños con bajo peso ha generado una gran controversia y es motivo de preocupación entre especialistas y la población en general.
En un reciente anuncio, Idalmi Martínez Pérez, jefa de Ventas del Grupo Alimentario, explicó que además de los productos de la canasta familiar, se distribuirá un módulo diferenciado para los niños con bajo peso y talla. Este módulo incluirá un kilogramo de pastas alimenticias, un kilogramo de galletas dulces, cuatro paquetes de sorbeto y un litro de sirope. Aunque todos estos productos ya han sido producidos y se encuentran en proceso de distribución, la elección de estos alimentos ha suscitado fuertes críticas.
La crítica principal radica en la composición de este módulo, que está cargado de azúcares y carbohidratos, elementos que no son adecuados para mejorar el peso y la salud de los niños con bajo peso. Las opiniones en redes sociales reflejan una gran preocupación por la falta de proteínas y nutrientes esenciales en este módulo.
Especialistas internacionales en nutrición infantil destacan la importancia de incluir en la dieta de los niños con bajo peso alimentos ricos en proteínas, vitaminas y minerales. Productos como frutas, lácteos, yogur, leche, quesos, cereales, carne, pollo, pescado, huevos y verduras son fundamentales para el desarrollo y la salud de los niños. Estos alimentos proporcionan los nutrientes necesarios para un crecimiento adecuado y para mejorar el estado nutricional general.
En contraste, los productos ofrecidos en el módulo del Minal están compuestos principalmente de azúcar y carbohidratos refinados, que pueden tener efectos negativos en la salud de los niños. El consumo excesivo de estos productos puede llevar a problemas de salud a largo plazo, como la obesidad y la diabetes, sin abordar adecuadamente el problema del bajo peso.