El Consejo de Ministros de Cuba, en una sesión extraordinaria, ha decidido aprobar seis decretos leyes destinados a regular el creciente sector privado del país. Según la alta cúpula castrista, se han identificado distorsiones que no estaban previstas cuando se anunció una ligera apertura económica, como la creación de micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) privadas.
Estos nuevos decretos, presentados ante el Consejo de Estado, tienen como objetivo ordenar el funcionamiento del sector privado. Entre los decretos aprobados se encuentran modificaciones al Decreto Ley 44 sobre el Trabajo por Cuenta Propia, el Decreto Ley 46 sobre las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes), y el Decreto Ley 47 sobre las Cooperativas no Agropecuarias.
Las modificaciones aprobadas también incluyen cambios en el régimen especial de seguridad social aplicable a los trabajadores por cuenta propia, socios de cooperativas y empleados de Mipymes, así como ajustes en el sistema tributario y en las contravenciones relacionadas con el trabajo no estatal.
Además de los decretos mencionados, se han adoptado otros como el Decreto modificativo del Decreto 49, que regula las actividades no autorizadas para las Mipymes, cooperativas no agropecuarias y trabajadores por cuenta propia. También se ha creado el Decreto para la formación del Instituto Nacional de Actores Económicos No Estatales. Estos esfuerzos reflejan el compromiso del gobierno cubano de corregir las distorsiones y reimpulsar la economía.
Marrero Cruz sobre las Nuevas Leyes: “No Son una Cruzada Contra el Sector Privado”
La sesión estuvo encabezada por el primer secretario del Comité Central del Partido Comunista y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y dirigida por el primer ministro, Manuel Marrero Cruz. El dirigente holguinero destacó que estos documentos son el resultado de un amplio proceso de consulta iniciado en 2023, en el que participaron organismos de la Administración Central del Estado, gobiernos territoriales, actores económicos no estatales y otros entes decisorios. Además, fueron discutidos en el Comité Central del Partido Comunista.
Marrero Cruz enfatizó que estas actualizaciones no representan una cruzada contra las Mipymes ni contra otras formas de gestión no estatal, sino que buscan regular y controlar estas actividades en concordancia con la visión del Congreso del Partido Comunista.
Una Visión Más Profunda de las Nuevas Regulaciones
En Cuba, la clase política de partido único rechaza que los cubanos sean prósperos con el fruto de su trabajo. Los únicos que pueden aumentar su fortuna son los miembros de la cúpula gobernante y los militares de alto rango que dominan gran parte de la economía del país, mediante el control del Grupo de Administración Empresarial (Gaesa). Este conglomerado no está sujeto a la fiscalización de la Contraloría General ni de ningún otro órgano, lo que ha generado críticas y desconfianza entre los ciudadanos y emprendedores cubanos.
Las nuevas leyes buscan corregir estas distorsiones y reimpulsar la economía, pero también generan incertidumbre sobre el futuro del sector privado en la isla. Con un marco regulatorio más estricto, los emprendedores y trabajadores por cuenta propia deberán adaptarse a las nuevas normativas para seguir operando en un entorno económico ya de por sí complejo.
