En un brutal y trágico incidente ocurrido en el poblado rural de Suferry, en Ciego de Ávila, un hombre asesinó a su exsuegro e hirió gravemente a su expareja y a una joven vecina. La violencia de este hecho ha conmocionado a la comunidad local y a los usuarios de las redes sociales.
Según los reportes, el agresor ha sido identificado como Richard Sánchez Ferrales. Este individuo, que estaba disfrutando de un pase de la cárcel donde se encontraba interno, irrumpió en la vivienda de su expareja en la noche del 8 de julio. La primera víctima de este ataque fue Félix Morales, un anciano de 70 años y exsuegro del agresor, quien fue atacado mortalmente con una mocha por la espalda.
Después de asesinar a Félix Morales, Sánchez Ferrales arremetió con la misma arma blanca contra Yumary Morales Guerra, su expareja. Yumary quedó gravemente herida y, aunque lucha por su vida, su estado sigue siendo crítico. Esta información fue divulgada por el reportero de sucesos Niover Licea, basado en testimonios de fuentes cercanas al caso.
En el mismo ataque, Yoledys Díaz Batista, una joven vecina y amiga de Yumary que acudió para ayudar a la familia, también fue gravemente herida. Yoledys sufrió una violenta lesión en el brazo que ha hecho temer por la posible pérdida de la extremidad.
Inicialmente, se reportó que una tercera persona, una menor de edad, también había sido herida en el incidente. Afortunadamente, esta información fue desmentida por Niover Licea y el grupo de Facebook «Denunciando Crímenes en Cuba», quienes se hicieron eco del suceso.
Ambas mujeres heridas se encuentran ingresadas en el hospital del municipio Morón, donde reciben atención médica urgente. Este violento acto ha generado una ola de consternación entre los internautas, quienes lamentan la creciente violencia que afecta a la sociedad cubana en diversos ámbitos.
Como suele ocurrir en estos casos, no ha habido confirmación oficial por parte de las autoridades. Sin embargo, de ser verificada por plataformas feministas, esta tragedia se sumaría a la alarmante lista de víctimas de violencia de género en Cuba en lo que va de año.
Este trágico suceso pone de manifiesto una vez más la urgencia de abordar la violencia de género y la inseguridad en Cuba. Las autoridades y la sociedad deben tomar medidas para prevenir y combatir estos actos violentos, protegiendo así a las víctimas potenciales y asegurando justicia para quienes han sufrido tales atrocidades.
La conmoción y el dolor de la comunidad son palpables, y es crucial que se haga justicia para las víctimas de este ataque. La violencia no puede tener cabida en nuestra sociedad, y es responsabilidad de todos trabajar juntos para erradicarla y construir un entorno seguro para todos los ciudadanos.
