El teólogo brasileño Frei Betto reapareció en el programa Mesa Redonda de la Televisión Cubana, ofreciendo una vez más sus «enseñanzas» a los cubanos sobre cómo transformar la necesidad en virtud.
Frei Betto, amigo cercano y admirador del dictador Fidel Castro, se presentó nuevamente en el programa oficialista como asesor de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) y como experto en «soberanía alimentaria».
El mero anuncio de su presencia en este controvertido programa informativo y de debate de la televisión del régimen cubano desató una oleada de comentarios en las redes sociales. Muchos cubanos, enojados y curiosos, se preguntaron cuál sería la última ocurrencia de Betto.
El recuerdo de su anterior participación en este programa, donde el teólogo brasileño compartió algunos consejos alimentarios inusuales, no se hizo esperar. Entre sus recomendaciones, destacó la de freír cáscaras de papas, asegurando que eran excelentes «para picar». «La cáscara de papa, por ejemplo, es excelente para picar cuando se toma un trago. Frita es excelente», afirmó el intelectual sudamericano en marzo de 2022.
Dos años y tres meses después, con la inseguridad alimentaria en aumento en Cuba, Betto volvió al set del programa para instar a los cubanos a “sembrar, aunque sean algunas plantas que permitan hacer una salsa en la ventana de la casa”. «Va a llegar el resultado. Es toda una etapa que estamos ya caminando para eso. Ahora es muy importante que la gente, sobre todo la gente que tiene condiciones o en la casa, o en la zona vecina vacía, o en el campo, de cultivar, sembrar… aunque sean algunas plantas que permitan hacer una salsa en la ventana de la casa», dijo.
Con nostalgia por el liderazgo del dictador al que dedicó su libro «Fidel y la religión», el sacerdote recordó las “iniciativas” desarrolladas durante el llamado “Período Especial”. «No había una zona vacía en La Habana. Todos los terrenos vacíos estaban transformados en huertos, y se plantaba y cultivaba viandas y hortalizas. Hay que hacer esa movilización también ahora. Los CDR, por ejemplo, pueden hacer esa movilización, y muchos ya están haciendo esto. Es muy importante», valoró el asesor de la FAO.
A punto de cumplir 80 años, Frei Betto comparte un «conocimiento» que los cubanos llevan años escuchando en las arengas y la propaganda del régimen, con destacados impulsores de iniciativas como el exespía Gerardo Hernández Nordelo, quien es un experto en el arte de «Cultivar tu pedacito» y plantar frutales en macetas.
Hace ya cuatro años, en junio de 2020, Hernández Nordelo hizo un llamado a producir alimentos en cualquier espacio posible y “aprovechar al máximo cada pedacito de tierra”, en medio de la dura crisis de alimentación, sanitaria y económica que enfrentaba la isla. Para ello, el gobierno cubano distribuyó un manual a la población con indicaciones para producir sus propios alimentos en todo espacio cultivable al que pudieran tener acceso, con el objetivo de que las personas aportaran no solo a su autoconsumo sino también al consumo de los demás.
“Del aporte de todos los cubanos depende que nosotros continuemos adelante con lo que hemos estado haciendo hasta ahora”, aseguró Hernández Nordelo. El boletín “Desde el barrio cultiva tu pedacito” era un documento que exhortaba a la población cubana a producir desde casa, presentando los conceptos y principios de la “agricultura familiar” y de “soberanía alimentaria”.
Un año después de esa iniciativa, en marzo de 2021, el primer ministro del régimen cubano, Manuel Marrero Cruz, llamaba a «tocar las puertas» de cubanos con patios para sembrarlos. “El pueblo no come planes”, sentenciaba el obeso dirigente.
Sin embargo, el déficit de alimentos en la dieta de los cubanos persiste y la producción agrícola no despega, ni en «pedacitos» ni en extensiones de cultivo. Quizás, como dijo el propio Betto (negando que en Cuba hubiera hambre), el problema es que «los cubanos tienen mucho apetito».
Quizás por ello, el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel decidió cambiar las consignas de la propaganda del régimen y llamó en fechas recientes a los cubanos a “guapear” la comida y no esperar por los alimentos de la canasta básica. “Tenemos que llegar al momento de que este país se autoabastezca de alimentos… Pero eso hay que creérselo. ¡Y cada municipio tiene que guapear su comida! Y no estar pensando en lo que va a entrar por la canasta”, dijo.
Feliz con la «resiliencia» que demuestra el pueblo cubano, el teólogo brasileño quizás lleve a los cuarteles generales de la FAO ese último concepto de la «resistencia creativa» del Doctor Díaz-Canel: la «guapería», una actitud ante la vida que la dictadura cubana pretende convertir en doctrina alimentaria.