El Consejo de la Administración Plaza de la Revolución ha emitido un comunicado oficial respecto a la situación del edificio Girón, tras el incendio de grandes dimensiones que ocurrió el pasado sábado. Aunque las autoridades han proporcionado algunos detalles sobre el incidente, persisten interrogantes en torno a la gestión y la falta de transparencia en el manejo de esta crisis.
Según el comunicado, los residentes de la torre Girón han comenzado a regresar a sus hogares. Sin embargo, no se han especificado las condiciones actuales de estos apartamentos ni se han dado garantías sobre la seguridad de la edificación, la cual ya presentaba problemas constructivos antes del incendio. Esta falta de claridad ha generado preocupación entre los residentes y la comunidad en general.
Mientras una parte del edificio ya cuenta con electricidad, en el ala afectada por el incendio aún se trabaja en el cableado eléctrico. Esta situación plantea dudas sobre la demora en restablecer un servicio esencial como la electricidad. A pesar de los esfuerzos, muchos residentes siguen sin saber cuándo podrán contar nuevamente con un suministro eléctrico confiable.
El sábado por la noche, los técnicos lograron habilitar el motor necesario para el suministro de agua a los apartamentos, lo que fue un alivio para muchos de los afectados. El gobierno informó que “los vecinos recibieron alimentos provistos por las autoridades de la capital y de actores económicos que solidariamente se sumaron de manera voluntaria”. Esta colaboración ha sido fundamental para aliviar la situación de los damnificados.
La Empresa Eléctrica de La Habana ha anunciado que llevará a cabo una evaluación este domingo para la reposición del cableado eléctrico por niveles en la edificación. No obstante, aún no se ha detallado una fecha clara de cuándo todas las familias afectadas tendrán electricidad nuevamente, lo que ha incrementado la incertidumbre entre los residentes del edificio Girón.
Hasta el momento, las autoridades cubanas no han ofrecido información sobre la causa del incendio, que fue controlado por los Bomberos de Cuba el sábado por la tarde. Este silencio oficial ha suscitado críticas y sospechas sobre la transparencia del proceso de investigación. La falta de información clara y oportuna sobre el origen del incendio y las medidas de seguridad a implementar ha dejado a muchos residentes preocupados y buscando respuestas.
Durante las intensas lluvias que afectaron a La Habana, la ciudad también sufrió grandes inundaciones. En este contexto, la situación del edificio Girón se ha vuelto aún más complicada. Las imágenes del incendio y las inundaciones han circulado ampliamente en las redes sociales, generando una ola de solidaridad y apoyo, pero también de cuestionamientos hacia la gestión gubernamental de la crisis.
