Una pareja y su hijo de 21 años murieron en la madrugada del lunes en La Habana tras declararse un incendio en su vivienda, provocado presuntamente por la explosión de una moto eléctrica. El trágico suceso tuvo lugar en la calle 62A entre 23 y 25, en el barrio de Buenavista del municipio Playa, según reportes en redes sociales.
Las víctimas fueron identificadas como Ghislen, su esposo Víctor, y el hijo de la pareja, José, de 21 años, quien estudiaba en la Universidad Tecnológica de La Habana José Antonio Echeverría (CUJAE). La noticia ha conmocionado a la comunidad, que llora la pérdida de esta familia.
Una publicación de La Tijera indicó que el Comando número 8 de los bomberos se encuentra a menos de un kilómetro de distancia del lugar del siniestro. Sin embargo, testigos aseguran que los bomberos tardaron 45 minutos en llegar a sofocar el incendio. “Los vecinos hicieron todo lo posible por rescatarlos, pero no pudieron romper las rejas de la puerta y las ventanas. Fueron corriendo hasta los bomberos y estos dijeron que no podían ir al lugar sin ser avisados por el puesto de mando. ¡Qué desgracia!”, concluyó la publicación.
La presunta demora de los bomberos por una cuestión burocrática desató decenas de comentarios críticos en redes sociales. Muchas personas se preguntan si es posible que una tragedia así haya sucedido debido a procedimientos administrativos. “No solo los bomberos, la ambulancia tampoco llegó nunca. El muchacho que era mi amigo y hermano, cuando lo sacaron todavía estaba vivo y se lo tuvieron que llevar en una patrulla”, explicó Darmir Urdanivia, amigo del joven fallecido. “Si hubieran llegado a tiempo los bomberos y hubiera habido una ambulancia en el lugar él se hubiera podido salvar, pero así pasó. Descansa en paz, José, se te quiere y extraña, mi hermano”, añadió.
Otros comentaristas hicieron hincapié en el peligro confirmado que es dormir con motorinas dentro de las casas, instando a evitarlo a toda costa. “Ellos tenían garaje pero les intentaron robar y mientras aseguraban el garaje esa noche decidieron dejarla dentro de la casa porque tenía más seguridad, y casualmente sucedió la desgracia”, acotó una internauta con conocimiento del caso. “Nadie quiere matar a nadie ni mucho menos morirse y el señor que falleció no era ningún irresponsable y adoraba a su familia. Los vecinos corrieron a llamar a los bomberos y no vinieron por puro burocratismo porque tenían que esperar que les avisara el puesto de mando”, añadió la misma fuente, reiterando la presunta demora de los bomberos.
Hasta el cierre de esta nota, fuentes oficialistas de prensa no han informado sobre la tragedia, que no es la primera de su tipo en los últimos años. En junio del pasado año, un voraz incendio acabó con la vida de los siete miembros de una familia en Centro Habana, dos de ellos niños, luego de la explosión de varias motos eléctricas dentro de una vivienda.