Andy Vázquez confesó sentirse profundamente afectado por la opinión generalizada en redes sociales tras haber ofrecido su casa a Ulises Toirac en caso de que este decidiera emigrar a Estados Unidos.
En un video publicado en la madrugada de este sábado, Andy Vázquez se disculpó con Ulises Toirac y explicó las circunstancias en las que escribió el mensaje de ofrecimiento. Toirac, sin mencionar nombres, había calificado la acción como «postureo».
Vázquez aclaró que no tenía el número de teléfono de su colega y que estaba en medio de una jornada ajetreada en su casa porque le estaban instalando una cerca. Lo que escribió en público fue una manifestación espontánea de afecto hacia alguien que una vez lo ayudó invitándolo al programa «¿Jura decir la verdad?».
En una segunda publicación de Ulises Toirac en Facebook, donde concluyó diciendo: «a la publicidad no se le pone bocina, sino brazo», Vázquez dio una extensa explicación sobre sus intenciones. «No lo hice con mala intención», expresó tanto por escrito como de viva voz, y sus disculpas fueron aceptadas por Toirac.
Sin embargo, molesto por quienes aseguran que busca likes y promoción, Vázquez anunció que «se acabó» y que no piensa ayudar a nadie más. “Entiendo que Ulises se haya sentido mal, que no le haya gustado que yo le haya ofrecido mi casa y mi ayuda a través de las redes sociales, pero hasta aquí llegué, no me llamen más”, dijo el humorista.
Vázquez detalló que su último gesto público de solidaridad será hacia Dayan Sotolongo, un joven con elefantiasis, para quien pidió ayuda recientemente para comprarle un pasaje a España para su tratamiento. “Se acabó, hasta aquí llegué. Yo no hago nada por likes, yo no puse un comentario por likes. No me llamen más para compartirme casos de personas necesitadas de ayuda», advirtió el humorista a sus seguidores.
El humorista se mostró visiblemente emocionado, incluso hasta las lágrimas, cuando anunció que a partir de ahora sus páginas serán exclusivamente para promociones y humor. «Me ganaron las clarias en este caso. Perdí la batalla […] A partir de hoy mis páginas todas van a ser de promociones y de humor, aunque en el humor voy a seguir tirándole a los gobernantes cubanos», concluyó.
Andy Vázquez relató cómo se sintió atacado en las redes sociales después de su oferta de ayuda a Toirac. Su intención, según explicó, nunca fue buscar atención ni beneficios personales, sino mostrar solidaridad con alguien que le tendió una mano en el pasado.
La reacción en redes sociales fue inmediata y feroz. Usuarios criticaron a Vázquez, sugiriendo que su gesto no era genuino, sino una táctica para ganar popularidad. A pesar de sus explicaciones, la opinión pública ya había emitido su veredicto, dejándolo en una posición incómoda y frustrada.
En medio de la tormenta mediática, Ulises Toirac respondió sin mencionar directamente a Vázquez, calificando la oferta como una forma de «postureo». Este término, que implica una actitud fingida o superficial, hirió profundamente a Vázquez, quien siempre había considerado su gesto como sincero y bien intencionado.
La situación llevó a Vázquez a un punto de inflexión. Decidió que no valía la pena continuar ofreciendo su ayuda públicamente si eso iba a ser malinterpretado. Su desilusión fue evidente cuando dijo: “No lo hice con mala intención”, y reiteró que sus disculpas eran sinceras.
Finalmente, la decisión de Vázquez de centrarse en Dayan Sotolongo y luego retirarse de las causas benéficas públicas fue un claro reflejo de su agotamiento emocional. «Me ganaron las clarias en este caso. Perdí la batalla», confesó, destacando su determinación de seguir adelante con un enfoque más reservado.
La emotiva declaración de Vázquez, que incluyó lágrimas y un tono de voz quebrado, subrayó el impacto personal que toda esta situación tuvo en él. A pesar de su desilusión, afirmó que continuará utilizando el humor para criticar a los gobernantes cubanos, manteniendo así su compromiso con la sátira política.
