En el barrio de Arroyo Naranjo, La Habana, se reportó un incidente preocupante donde un hombre con problemas de salud mental provocó un incendio en su vivienda, situada en un edificio en la Calle Arday, entre Escambray y Florida. Según los vecinos, el fuego causó alarma entre los residentes, especialmente afectando a una familia que vive directamente encima del apartamento donde comenzó el fuego.
Diamelba Hernández, una de las vecinas, compartió en Facebook que después de provocar el incendio, el hombre se trasladó a un parque cercano para observar la situación. Mientras tanto, una madre con su hija pequeña en el apartamento superior luchaba por escapar, ya que el fuego bloqueaba su ruta de salida, exponiendo a la niña a riesgos de asfixia y a los vecinos a un peligro inminente.
Pese a la gravedad del acto, el hombre fue detenido brevemente pero luego liberado por las autoridades, quienes lo consideraron un caso para la Atención a la Ciudadanía en el Gobierno municipal. Esta decisión ha causado consternación entre los residentes, más aún cuando se reportó que, tras su liberación, el hombre obstaculizó la entrada de varios apartamentos, encerrando a sus ocupantes dentro.
La comunidad está notablemente alarmada, no solo por el incendio sino también por la conducta posterior del individuo, que parece seguir representando una amenaza para la seguridad de sus vecinos. Este incidente resalta el problema más amplio de la falta de recursos adecuados para la atención de personas con problemas de salud mental en Cuba, donde la escasez de medicamentos y servicios especializados ha sido un tema de continua preocupación.
