En medio de la creciente preocupación por la disponibilidad de medicamentos en Cuba, surge una idea que podría cambiar el panorama de la salud en la isla. Un reciente artículo de la prensa oficialista cubana plantea la posibilidad de distribuir los medicamentos a través de la libreta de abastecimiento, una propuesta que no deja indiferente a nadie.
La opinión, expresada en la sección «Tribuna del lector» del periódico de La Habana, sugiere que esta medida no es tan «descabellada» como podría pensarse inicialmente. Vivian Bustamante Molina, autora del artículo, plantea: «¿Distribuir los medicamentos del tarjetón según la numeración de la libreta de abastecimientos? Por descabellada que pueda parecer tal afirmación, no andan por muy mal camino esos comentarios».
En un país donde la disponibilidad de medicamentos ha sido un desafío persistente durante años, esta propuesta no deja de tener su lógica. «Sería parecido a la venta del módulo básico en las cadenas de tiendas», explica Bustamante Molina, destacando la posible garantía de acceso a los fármacos en un período de tiempo determinado, algo que actualmente resulta un desafío para muchos ciudadanos cubanos.
La autora reconoce abiertamente que la disponibilidad y entrega de medicamentos en Cuba no ha logrado satisfacer la demanda debido a las dificultades financieras del país. Sin embargo, señala una posible solución en la revisión de los tarjetones, proceso que según afirma, ya está en marcha en la capital cubana.
A pesar de las afirmaciones recientes por parte de las autoridades cubanas sobre la recuperación de la producción habitual de algunos fármacos, la realidad es que las carencias persisten. El gobierno incluso ha extendido la entrada libre de medicamentos y más de 100 insumos médicos, evidenciando la magnitud del problema.
En este contexto, no sorprende la acogida positiva que ha tenido la propuesta de distribuir medicamentos a través de la libreta de abastecimiento entre los cubanos. «Sería fantástico. Desde que cogemos el módulo en la Tienda Otero en Centro Habana, se acabó el problema», comenta un lector de Tribuna de La Habana, reflejando la esperanza que esta medida podría brindar a quienes luchan por acceder a los medicamentos necesarios para su salud.
Otro testimonio refleja la urgencia de la situación: «Es imposible comprar los medicamentos, si tienes problemas de salud, por tarjetón en la cola siempre las mismas personas. Hace meses no alcanzo Levotiroxina, Copidogrel y ahora hasta el Carvidolol». Estas palabras ilustran la realidad diaria de muchos cubanos que se enfrentan a la escasez de medicamentos.
En conclusión, la propuesta de distribuir medicamentos por la libreta de abastecimiento en Cuba ha generado un intenso debate. Si bien representa un paso hacia posibles soluciones para la crisis de salud en la isla, también plantea desafíos logísticos y administrativos. Sin embargo, ante la urgencia de la situación, es necesario explorar todas las opciones viables para garantizar el acceso a la atención médica y los medicamentos esenciales para todos los ciudadanos cubanos.