Hace veinte años, la telenovela cubana «Destino prohibido» marcó un hito en la televisión del país, consolidándose como una de las producciones más destacadas del siglo. En esta serie, la joven María del Pilar, interpretada por Tahimí Alvariño, se encontraba atrapada en un triángulo amoroso entre un hombre socialmente adecuado y Samuel, un empleado mestizo interpretado por Miguel Fonseca.
Además del drama romántico, la telenovela abordaba temas complejos como la discriminación racial, las diferencias de clase, la envidia, y más, a lo largo de sus noventa horas de duración. Esta obra fue crucial para catapultar a la fama a Miguel Guillermo Fonseca Alcolea, quien hasta ese momento había trabajado principalmente en el teatro, debutando en 1998.
A pesar de su éxito en «Destino prohibido», Fonseca no se mantuvo de forma constante en la televisión. Regresó brevemente en 2011 con «Bajo el mismo sol», y participó en otras producciones como el policiaco «Tras la huella» y el programa infantil «Flores con Patricia».
En los últimos años, Fonseca ha seguido activo en el teatro. En 2023, participó en producciones como «Más unidos que nunca» de Teatro del Sol y «Teatro en minutos» de Teatro del Silencio, donde también actuó en obras como «Dos perdidos en una sucia ciudad» y «El maestro y la ninfa».
Su talento en el teatro fue reconocido con el premio Caricato de Actuación en 2018 por su actuación en «Huellas de Caín», y en 2019, ganó el premio de actuación en el X Festival Internacional de Teatro Clásico Adaptado de Mar Chiquita, Argentina. Aunque su presencia en la televisión ha sido esporádica, Fonseca ha mantenido una carrera teatral prolífica y respetada.