Las obras de reparación del túnel de la bahía de La Habana, previamente anunciadas, han comenzado este sábado, tal como informó el Ministro del Transporte de Cuba, Eduardo Rodríguez Dávila, a través de su perfil en Facebook. La directora general del Centro Nacional de Vialidad, Sandra Loureiro Rodríguez, estuvo presente en el inicio de los trabajos, que se llevaron a cabo desde la madrugada del sábado, enfocándose inicialmente en el tramo Habana-Cabañas.
El primer paso de la reparación consistió en la sustitución de una rejilla esencial para la evacuación de aguas, la cual, con el paso del tiempo, había cambiado de posición, haciéndose necesario colocar una plancha metálica en su lugar. La demolición del hormigón que sostenía la rejilla está siendo realizada por la Empresa de Viales de La Habana y la empresa de Construcciones del Transporte.
El proceso de reparación incluye la demolición, la recogida de escombros, la retirada del material antiguo, el encofrado, la limpieza y el vertido de nuevo hormigón para solucionar el deterioro de la zona de la rejilla. Este trabajo, dividido en turnos de 12 horas entre dos empresas constructoras, se extenderá por tres días, seguidos de una espera de siete días para el fraguado inicial del hormigón antes de la reapertura del túnel.
Una vez reabierto el túnel, se colocará una plancha de protección sobre la rejilla hasta el 5 de mayo, fecha en la que se espera alcanzar el fraguado definitivo. Durante el periodo de cierre, solo los vehículos con régimen especial de circulación, como ambulancias, bomberos y policía, tendrán acceso al túnel. También se permitirá el paso a vehículos de transporte público, taxis, ruteros y porteadores privados debidamente identificados.
A pesar de los estudios realizados por la Empresa Nacional de Investigaciones Aplicadas (ENIA) del MICONS, que concluyeron que el ciclo de goteo actual es similar al de años anteriores, se planea una intervención para la impermeabilización del túnel, aunque no está incluida en el mantenimiento actual debido a la necesidad de condiciones, materiales y asesoría especializada. Rodríguez Dávila aseguró que el goteo no representa un peligro inmediato para la estructura o la circulación en el túnel.
El túnel de la bahía de La Habana, con más de 65 años de historia, ha sido objeto de mantenimientos en varias ocasiones, incluyendo una reparación capital en 2001 llevada a cabo por la misma compañía francesa responsable de su construcción.