El Consulado General de España en Buenos Aires se convierte en un centro de actividad frenética, procesando un impresionante número de solicitudes de nacionalidad bajo la Ley de Memoria Democrática (LMD). Desde su entrada en vigor, esta legislación, también conocida como ‘Ley de Nietos’, ha generado un flujo constante de nuevos ciudadanos españoles, con más de 10,000 personas inscritas solo a través de esta vía legal.
El trabajo eficiente del consulado ha sido destacado, especialmente en un contexto donde la demanda no muestra signos de disminuir. En marzo de 2024, el consulado registró la incorporación de 1,152 nuevos españoles, mientras que más de 9,000 expedientes llegaban a sus puertas, 7,280 de los cuales estaban relacionados con la LMD. Para hacer frente a esta abrumadora carga de trabajo, el consulado ha implementado turnos extendidos de 8 de la mañana a 8 de la noche, de lunes a viernes, según lo reportado recientemente.
A pesar de este esfuerzo, algunas voces críticas reclaman una mayor transparencia y claridad en el proceso de trámite de las solicitudes. Solicitantes desean estar informados sobre el estado de sus expedientes y exigen una mayor comunicación por parte del consulado.
El caso de Cuba llama la atención en este escenario. En un país donde la demanda de nacionalidad española bajo la LMD es significativamente alta, las críticas no cesan. Varios afectados han reportado que sus expedientes están “rezagados”, a pesar de haber proporcionado la documentación completa.
David Casarejos, Presidente de la Comisión de Derechos Civiles y Participación del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, ha señalado que la situación en La Habana es particularmente desafiante. Mientras algunos consulados tienen tasas de aprobación del 100%, otros registran un número alarmantemente bajo de inscripciones. La Habana, con una de las mayores cargas de solicitudes, enfrenta dificultades para satisfacer la demanda.
A pesar de que más de 22,000 cubanos han obtenido la nacionalidad española bajo la LMD, un récord negativo pesa sobre ellos: encabezan la lista de expedientes rechazados por no cumplir con las normativas establecidas. En el primer año de la ley, se denegaron 301 solicitudes de ciudadanos cubanos, evidenciando los desafíos y obstáculos que enfrentan los solicitantes en este proceso.