Los residentes de La Habana enfrentan cada vez más obstáculos para movilizarse debido a una notable disminución en el servicio de las “gacelas” de Metrotaxi, situación exacerbada por la continua crisis de combustible que afecta a la nación.
Taxis Cuba ha comunicado que la operatividad de su flota de microbuses Gazzelle se ha visto significativamente mermada. La entidad no ha proporcionado detalles sobre cuándo se restablecerá completamente el servicio, atribuyendo el problema a la escasez de combustible.
“En los últimos dos días, hemos experimentado problemas para suministrar combustible a los vehículos de Metrotaxi, lo que ha impedido cumplir con los itinerarios y rutas programados”, indicó Taxis Cuba a través de Facebook.
Este contratiempo se suma a la progresiva descomposición del sistema de transporte público en Cuba, caracterizado por una oferta decreciente y tarifas en aumento. La situación se agrava aún más con la reciente volatilidad en el abastecimiento de combustible en el país.
La problemática con las “gacelas” surge en un momento en que el gobierno ha intentado regular las tarifas impuestas por los transportistas privados, sin tener en cuenta la falta de recursos y tras comenzar a comercializar combustible en moneda extranjera en varias estaciones de servicio del país.
Eduardo Rodríguez Dávila, ministro de Transporte, ha expresado la necesidad de buscar financiamiento en divisas para adquirir más vehículos que mejoren el servicio de transporte, mostrando especial interés en vehículos eléctricos. Sin embargo, esta propuesta ha generado preocupación entre los cubanos debido a los frecuentes cortes eléctricos que sufre el país.
Manuel Marrero Cruz, Primer Ministro, instó en febrero a aplicar sanciones más estrictas contra los incrementos en las tarifas del transporte privado.
Las medidas gubernamentales destinadas a mitigar el aumento de precios en este sector podrían estar contribuyendo al deterioro de uno de los pocos servicios que aún funcionaba con relativa normalidad en la capital.
La dificultad para desplazarse en La Habana se ha convertido en un problema diario para muchos, complicando el acceso a los lugares de trabajo, instituciones educativas y la realización de trámites cotidianos.