El mandatario Miguel Díaz-Canel se jactó en sus plataformas digitales de la calidez y aceptación que recibió en Santiago de Cuba, una localidad que recientemente fue escenario de significativas manifestaciones. Con un tono irónico, expresó: “Les comparto imágenes de Cuba con el pueblo en las calles. Las tomó nuestro Equipo de Comunicación en Santiago. Podemos facilitarlas, sin costo, a los medios y plataformas que el domingo 17/3 parecían muy preocupados por el pueblo cubano”.
La administración está empeñada en mejorar la percepción pública de Díaz-Canel, designado por Raúl Castro, recurriendo a la maquinaria mediática estatal y a los denominados «ciberclarias» para difundir una imagen de proximidad y compromiso del líder con las bases populares.
Esta táctica, reminiscente de las empleadas por regímenes autoritarios y carentes de libertad de prensa, parece poco efectiva en convencer a la ciudadanía de que la «revolución» aún cuenta con el respaldo mayoritario y está liderada por figuras surgidas del seno del pueblo, atentas a sus dificultades y aspiraciones.
Díaz-Canel aseguró en su perfil de X (anteriormente Twitter): “Desde Presidencia seguiremos fortaleciendo la comunicación con el pueblo, pero nunca abandonaremos el contacto directo”, compartiendo imágenes de cálidas bienvenidas en Guantánamo y Santiago de Cuba, y destacando el «cariño muy especial, que energiza y multiplica el compromiso» recibido por parte de la población.