El escenario político de Cuba ha sido sacudido por las protestas del pasado domingo, y el presidente Miguel Díaz-Canel ha emitido su declaración al respecto. Desde un vecindario santiaguero hasta las redes sociales, el descontento se manifestó en las calles, y las respuestas gubernamentales no tardaron en llegar.
Díaz-Canel, en un comunicado en redes sociales, desestimó las protestas como un intento de aprovechar el sufrimiento del pueblo cubano. Criticó la intervención de políticos y grupos desde el sur de Florida, acusándolos de injerencia y caos, y declaró que «se quedaron con las ganas».
El presidente cubano, en sus primeras declaraciones, atribuyó las protestas a la insatisfacción con el servicio eléctrico y la distribución de alimentos. Sin embargo, señaló que los enemigos de la Revolución han intentado aprovechar esta situación para desestabilizar el país, una táctica que el régimen cubano ha denunciado en repetidas ocasiones.
A pesar de los esfuerzos del gobierno por dar por terminadas las protestas, informes en las redes sociales indican que las manifestaciones continúan en Santiago de Cuba, con demandas de liberación para los detenidos durante las protestas.
Las redes sociales se convierten en el medio para compartir la realidad en las calles, con usuarios como Indira Solís informando en tiempo real sobre las manifestaciones en El Cobre y la exigencia de libertad para los detenidos. El periodista Mario J. Pentón también contribuyó, compartiendo videos que muestran la persistencia de las protestas y la demanda de liberación de los detenidos.
Las protestas, que comenzaron en la tarde del domingo en la Avenida de Carretera del Morro y calle 9 de Veguita de Galo en Santiago de Cuba, se extendieron hasta El Cobre, donde se encuentra el Santuario de la Virgen de la Caridad, Patrona de Cuba.
El gobierno cubano, en un intento por mantener el orden y la estabilidad, sigue culpando a actores externos y al bloqueo económico de Estados Unidos por los problemas internos del país. El primer ministro Manuel Marrero Cruz replicó el discurso gubernamental, llamando a trabajar en paz para superar los desafíos y garantizar la tranquilidad ciudadana.
En medio de la agitación, la maquinaria propagandística del gobierno continúa su labor, compartiendo mensajes en redes sociales con citas del líder revolucionario Fidel Castro. Sin embargo, la efectividad de estos mensajes es cuestionada, siendo percibidos como aburridos y vacíos por algunos observadores.
El gobierno cubano, representado por Díaz-Canel y Marrero Cruz, busca mantener el control de la situación y desacreditar las protestas como un intento de desestabilización. Mientras tanto, en las calles de Cuba, la voz del pueblo sigue resonando, exigiendo cambios y libertad.
