Arrestan y enjuician a 18 cubanos en La Habana acusados de robar más de 1 millón de pesos en alimentos de cadenas de tiendas estatales

Redacción

Una operación policial en Cuba ha desmantelado una red delictiva responsable de numerosos robos en tiendas estatales de La Habana, según informaciones de medios oficiales. La investigación ha resultado en la imputación de 18 individuos y ha revelado pérdidas que superan el millón de pesos cubanos.

La red se dedicaba a sustraer productos de las bodegas, lugares donde se distribuyen los alimentos subvencionados por el estado a través de la libreta de abastecimiento. Los delitos cometidos a lo largo de 2023 han afectado el suministro de artículos esenciales como arroz, cigarros, aceite, leche y café, impactando a miles de habitantes de la capital.

Entre los procesados se encuentran varios empleados del sector público, quienes enfrentan posibles condenas de entre 7 y 15 años de prisión por el delito de robo con fuerza en las cosas de manera continuada.

Durante la operación, las autoridades lograron recuperar una parte de los bienes robados y frustrar otros posibles robos planeados por estas redes criminales. Además, se mencionó que recientemente tres empleados públicos fueron condenados a penas de cárcel en un juicio considerado «público y ejemplarizante» por casos similares de sustracción de alimentos en La Habana.

Este esfuerzo forma parte de una campaña más amplia del gobierno cubano para combatir la corrupción y la negligencia dentro de las entidades estatales. En las últimas semanas, los medios oficiales han reportado sobre diversas operaciones que han desarticulado tramas organizadas, subrayando la determinación de las autoridades en enfrentar estos desafíos.

El primer ministro Manuel Marrero ha hecho un llamado a aplicar medidas más estrictas contra la corrupción, enfatizando la necesidad de mayor exigencia y control en las fábricas y almacenes. Este caso se suma a otros incidentes significativos, como el robo de 133 toneladas de pollo congelado de almacenes estatales en La Habana, que generó beneficios ilícitos estimados en 1,35 millones de dólares y resultó en múltiples despidos y detenciones.