En la provincia de Guantánamo, un nuevo gimnasio y parque de ejercicios, construidos enteramente de madera y situados al aire libre, han sido motivo de orgullo para los funcionarios del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER). A pesar de la simplicidad de su construcción, estas instalaciones representan un esfuerzo por promover la actividad física en la comunidad, especialmente en una era dominada por la tecnología y los avances científicos.
La noticia fue compartida en Facebook por la usuaria Laritza Cabrera, quien celebró la finalización de este proyecto en la comunidad 21 Caballería, acompañando su publicación con imágenes que evidencian la rusticidad de las instalaciones. Aunque la iniciativa ha sido bien recibida por algunos, las fotos revelan que el gimnasio dista mucho de los estándares modernos, con equipos fabricados en madera y expuestos a las inclemencias del tiempo.
Esta situación no es exclusiva de Guantánamo. En toda Cuba, los gimnasios enfrentan serias limitaciones en cuanto a equipamiento y condiciones, lo que dificulta la práctica del ejercicio físico. La falta de inversión estatal en infraestructuras deportivas ha llevado a que muchas iniciativas privadas cobren relevancia, aunque estas también se ven limitadas por las restricciones del país.
Un ejemplo de esto es un gimnasio en Santa Clara, mostrado en un video por la creadora de contenido conocida como “Matrioshka cubana” en TikTok. A pesar de ser uno de los mejor equipados de la ciudad, el gimnasio cuenta con equipos de fabricación casera y condiciones lejos de ser ideales, con una cuota mensual que representa una fracción significativa del salario mínimo en la isla.
El gimnasio cuenta con equipos como elípticas de uso al aire libre, mancuernas oxidadas y ventiladores antiguos, además de un segundo piso con bicicletas y escaladoras bajo un techo de metal que aumenta la temperatura del lugar, convirtiéndolo en una especie de sauna.
Para los entusiastas del fitness como Lili Lastres, mantener un estilo de vida activo en Cuba se convierte en un desafío no solo por la falta de instalaciones adecuadas, sino también por las carencias alimenticias y otras dificultades que enfrenta el país. A pesar de estos obstáculos, la comunidad sigue buscando maneras de promover la salud y el bienestar a través del ejercicio físico.
