El paisaje de La Habana se tiñe de verde con la apertura de una nueva era en movilidad sostenible: la primera estación de carga para motos eléctricas con energía renovable. Esta iniciativa, liderada por el régimen, marca un hito en la búsqueda de soluciones innovadoras para los desafíos de transporte en la isla.
La noticia, compartida en la página de Facebook del Gobierno de La Habana, revela un paso audaz hacia un futuro más limpio y eficiente en términos energéticos. La estación, ubicada en la Facultad de Ciencias Médicas de La Habana, es el fruto del trabajo conjunto entre la empresa de base Tecnológica Electrika SURL y el Parque Científico Tecnológico de La Habana, destacándose como un caso de éxito en el Ecosistema de Innovación local.
Las motos eléctricas, cada vez más presentes en las calles de La Habana, ofrecen una alternativa vital ante la escasez de transporte público y los desafíos económicos que dificultan la adquisición de vehículos tradicionales. Sin embargo, la transición hacia esta nueva forma de movilidad no está exenta de obstáculos.
Las preocupaciones sobre la seguridad de las motos eléctricas han aumentado, especialmente después de incidentes como la explosión de una motorina eléctrica en una vivienda de Sancti Spíritus en abril de 2021. La tragedia resultó en la pérdida de vida de una ciudadana cubana y dejó a dos niños en estado crítico en el Hospital Pediátrico de Sancti Spíritus, según informó Radio Vitral a través de su perfil en Facebook.
Este suceso subraya la importancia de abordar no solo la movilidad sostenible, sino también la seguridad en el uso de tecnologías emergentes como las motos eléctricas. En este contexto, la inauguración de la estación de carga en La Habana representa un paso adelante en la búsqueda de soluciones integrales que promuevan un futuro más seguro y sustentable para todos.