En medio de la difícil situación económica que atraviesa Cuba, un rayo de esperanza ilumina las calles de Santa Clara gracias a un grupo de jóvenes cubanos comprometidos con combatir el hambre y la pobreza en su comunidad. Organizados por la Diócesis de Santa Clara, estos jóvenes están llevando alimentos y esperanza a personas en situación de calle como parte del proyecto “Tuve Hambre”, impulsado por la parroquia Nuestra Señora del Carmen de la capital villaclareña.
La Oficina de Prensa del Obispado de Santa Clara compartió en Facebook este acto de solidaridad, destacando la labor de estos jóvenes que, junto con sus pastores, catequistas y colaboradores, recorren las calles de la ciudad entregando platos de comida caliente y ofreciendo palabras de amor y esperanza a quienes más lo necesitan.
La iniciativa ha generado un impacto positivo en la comunidad, resaltando la importancia del apoyo mutuo y la solidaridad en tiempos difíciles. La Iglesia invita a más jóvenes de la provincia a unirse y colaborar con esta noble causa, demostrando que juntos pueden marcar la diferencia en la vida de quienes sufren.
Proyectos similares están surgiendo en otras provincias cubanas como Ciego de Ávila, Camagüey y La Habana, en respuesta al agravamiento de la crisis económica que ha empujado a una gran parte de la población cubana a vivir en condiciones de extrema pobreza. La proliferación de iniciativas como esta refleja el espíritu de solidaridad y ayuda mutua que caracteriza a la sociedad cubana, incluso en tiempos de adversidad.
A medida que la población de personas en situación de calle se multiplica, especialmente afectando a los ancianos según indican estadísticas de observatorios independientes, acciones como estas se vuelven cada vez más relevantes y necesarias. Es un recordatorio de la importancia de cuidar y apoyar a los más vulnerables en la sociedad, y un ejemplo inspirador de cómo la comunidad puede unirse para hacer frente a los desafíos comunes.
