Un incidente sorprendente ha sacudido la tranquilidad de un hostal en la céntrica ciudad de Santa Clara a principios de febrero. Un turista, alojado en este establecimiento, fue víctima de robo por parte de una mujer que ingresó a su habitación y se llevó alrededor de 5.000 euros, según informes del perfil de Facebook Fuerza del Pueblo, vinculado a los órganos de la Seguridad del Estado en Villa Clara.
Según los reportes, la rápida acción policial siguió a la denuncia correspondiente, dada la gravedad de la situación al involucrar a un ciudadano extranjero que también había sido víctima de la sustracción de su teléfono celular.
La presunta autora del robo fue identificada como Keily Contreras, una ciudadana cubana. La policía la detuvo y le incautó el dinero y el teléfono celular sustraído. Se descubrió que Contreras había estado compartiendo con el turista en un bar del centro de la ciudad, donde logró obtener la llave del hostal.
El modus operandi de Contreras revela una premeditación notable, ya que entró en la habitación del turista en horas de la madrugada, demostrando así un estudio previo de la víctima. Sin embargo, su plan no contempló la posibilidad de ser fácilmente identificada luego del robo, lo que eventualmente condujo a su captura por parte de las autoridades.
Este incidente pone de relieve no solo la vulnerabilidad de los huéspedes en establecimientos como hostales, sino también la audacia de los delincuentes en áreas que se consideran seguras. La detención de Contreras, quien admitió su participación en el robo, está siendo investigada en relación con posibles implicaciones en otros delitos similares, lo que podría desvelar una red delictiva previamente no detectada.
Entre los comentarios en la publicación de Facebook, destaca el análisis de Moreira Febrero, quien resalta la importancia de conocer las regulaciones aduaneras cubanas, señalando que el turista podría enfrentar consecuencias legales si violó estas regulaciones al intentar ingresar una cantidad tan grande de dinero al país. Aunque esto no justifica el robo, resalta la complejidad del caso.