La comunidad de Camagüey está conmocionada tras el trágico asesinato de un joven conocido afectuosamente como Leo, cuya vida fue abruptamente interrumpida este fin de semana. Este lamentable suceso se suma a la alarmante tendencia de incremento en la criminalidad que ha venido afectando a Cuba en tiempos recientes.
Leo, cuya historia personal y circunstancias del asesinato aún permanecen en gran parte sin revelar, ha dejado un vacío profundo en el corazón de sus seres queridos. Amigos y familiares han recurrido a las redes sociales para expresar su dolor y despedirse de quien describen como un ser querido excepcional.
Dayi La Chini, una amiga cercana, compartió un emotivo mensaje en Facebook, expresando su desolación y el impacto que la noticia ha tenido en su espíritu. “Mi niño, no sé cómo expresar el dolor que estoy sintiendo”, escribió, evidenciando la profunda tristeza que la embarga por la pérdida de Leo, a quien consideraba más que un amigo, un hermano.
Yadiel Sánchez, otro amigo cercano, también expresó su incredulidad y pesar ante la noticia. “Mi hermano, no me creo todavía”, lamentó, destacando la especial conexión que compartían y la injusticia de su prematura partida.
La comunidad en línea ha respondido con una ola de condolencias y llamados a la justicia, reflejando la indignación colectiva ante la creciente violencia y la aparente falta de acción por parte de las autoridades para abordar estos crímenes. La ausencia de cobertura por parte de la prensa oficialista y la falta de comunicación oficial sobre el incidente solo han intensificado la frustración y el miedo entre los ciudadanos.
Este asesinato se suma a una serie de crímenes violentos que han sacudido a Camagüey y otras regiones de Cuba en los últimos meses, incluyendo el asesinato de Leandro Martínez Pelegrín en Piedrecitas y la trágica muerte de Cristian Villariño en las afueras de la pista de El Rodeo. Además, el reciente asesinato de Diana Rosa Cervantes Mejías en circunstancias espantosas ha resaltado la urgente necesidad de abordar la violencia doméstica y la seguridad ciudadana en la isla.
