La polémica designación de Alberto López Díaz: ¿Por qué liderar la Industria Alimentaria en Cuba sin experiencia previa en el sector?

Redacción

El panorama político en Cuba ha sido testigo de una controvertida designación en el Consejo de Ministros, liderada por el presidente Miguel Díaz-Canel. En esta ocasión, el villaclareño Alberto López Díaz ha sido nombrado Ministro de la Industria Alimentaria, a pesar de carecer de experiencia previa en dicho sector.

Nacido el 8 de agosto de 1966 en Santa Clara, la misma ciudad que el actual presidente cubano, Díaz-Canel, López Díaz tiene una formación como Licenciado en Construcción de Maquinarias del Instituto Superior Pedagógico “Félix Varela”. Su carrera inicial se desarrolló en el ámbito empresarial, liderando dos importantes empresas en Villa Clara: Servicios Técnicos Personales y Universal Villa Clara. Aunque ninguna de ellas tiene relación con la industria alimentaria, su lealtad al Partido Comunista Cubano (PCC) marcó el inicio de su incursión en la política y la administración pública.

La transición de López Díaz incluyó roles como secretario y vicepresidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular en Santa Clara. En 2020, ascendió a Gobernador provincial en Villa Clara, consolidando su posición en la esfera política. Su participación en el 8vo. Congreso del PCC y otros roles en el Comité Provincial subrayan su compromiso con el partido y el gobierno.

Aunque sus méritos incluyen reconocimientos como las Medallas Aniversario 50 y 65 de las FAR y la Distinción Servicio Distinguido, el nuevo Ministro de la Industria Alimentaria ha generado polémica. Uno de los momentos destacados fue cuando, durante su mandato como Gobernador, culpó a los villaclareños de falta de fuerza de trabajo en la producción de alimentos, atribuyendo el problema a la supuesta “vagancia” de la población.

El antecesor de López Díaz, Manuel Santiago Sobrino Martínez, también ascendió desde el cargo de Gobernador, en su caso en la provincia de Granma. Su gestión como Ministro de la Industria Alimentaria estuvo marcada por una de las mayores crisis de escasez de alimentos en Cuba.

La designación de dirigentes en Cuba, una vez más, plantea interrogantes sobre la primacía de la fidelidad política sobre la experiencia y competencia profesional. La falta de antecedentes en el sector alimentario de Alberto López Díaz resalta la tendencia de las designaciones basadas en la lealtad al PCC y, en este caso, posiblemente en una relación cercana con el presidente.