En el Hospital Pediátrico de Holguín, un equipo médico logró un notable éxito al realizar una cirugía a un joven paciente de 12 años, extrayendo un casquillo de portaminas que había ingerido accidentalmente. Este incidente, que podría haber tenido consecuencias graves, se resolvió gracias a la destreza y el compromiso del personal sanitario involucrado.
El caso, que ha captado la atención de la comunidad local, involucra a un niño residente en el municipio de Moa. Aunque los detalles específicos de cómo ocurrió el incidente no se han divulgado ampliamente, el resultado exitoso de la operación ha sido motivo de alivio y celebración.
El Dr. Alberto Ibarra Batista, especialista en Otorrinolaringología y líder del equipo quirúrgico, expresó su satisfacción por el resultado positivo de la intervención. A través de las redes sociales, compartió su alegría por haber contribuido a salvar la vida del joven paciente, destacando el compromiso del hospital con la salud infantil.
La comunidad ha respondido con gratitud y admiración hacia el Dr. Ibarra Batista y su equipo, reconociendo no solo su habilidad profesional sino también su dedicación en un contexto de recursos limitados que caracteriza al sistema de salud cubano.
Este no es el primer caso de este tipo atendido por el equipo del Dr. Ibarra Batista. Anteriormente, se enfrentaron a desafíos similares, como el de un niño de año y medio que ingirió un muelle metálico y una niña que tragó accidentalmente una tuerca. Ambos casos fueron manejados con la misma pericia y cuidado, subrayando la importancia de la atención pediátrica especializada en la prevención y tratamiento de accidentes infantiles.
