Joven cubana denuncia reiterados robos en el patio de su casa

Redacción

La historia de Ali Valladares, una joven cubana, ha resonado recientemente en las redes sociales, donde denunció enérgicamente los reiterados robos que han ocurrido en el patio de su casa. La situación se ha vuelto insostenible para Ali desde la partida de su pareja del país, momento a partir del cual los hurtos se han convertido en una triste rutina.

En sus propias palabras, Ali expresó su frustración: “No soy de publicar estas cosas, pero está bueno ya, hace ya 4 meses que mi esposo salió de este país, dos o tres singaos, porque es la palabra que llevan, no han dejado de meterse en mi patio”. La joven ha decidido hacer pública su experiencia para llamar la atención sobre la creciente problemática que enfrenta.

El relato de Ali se vuelve más desgarrador cuando comparte detalles específicos de los robos: “Ahora para colmo después de unas gallinas y dos conejos se robaron una lámpara”. La impotencia y la sensación de vulnerabilidad se reflejan en sus palabras, manifestando cómo la delincuencia ha afectado no solo sus posesiones, sino también su paz y tranquilidad.

No soy de publicar estás cosas pero está bueno ya hace ya 4 meses q mi esposo salió de este país dos o tres singaos porq…

Posted by Ali Valladares on Monday, January 22, 2024

Con valentía, Ali apunta a la justicia divina y a la conciencia de aquellos que han cometido estos actos: “Un día van a caer porque la justicia divina tarde o temprano les llega a todos y el mal que hacen se paga, sé que hasta van a leer esto, tuvieron que esperar a que mi esposo no estaba para meterse en mi patio porque jamás se habían metido”.

La joven hace un llamado a la responsabilidad y al respeto: “Está bueno ya de su falta de respeto, ustedes tienen familia y algún día lo van a pagar con tan solo robarse esa miserable lámpara hay que vigilar nuestros hogares y cuadras”. Su testimonio resalta la importancia de la seguridad y la necesidad de proteger nuestros hogares ante la creciente inseguridad.

Ali Valladares no solo comparte su experiencia personal, sino que también señala la preocupante realidad de la inseguridad en Cuba: “A dónde vamos a parar en este municipio y sin ofender a nadie ya no hay tranquilidad y para colmo no son de muy lejos porque se pasan el día velando y velando a ver qué me pueden llevar”.