Noel Díaz, el guajiro cubano que vive al estilo de un jeque árabe con diez mujeres a la vez en su casa en Viñales

Redacción

En la provincia de Pinar del Río, Cuba, se encuentra una finca de 38 hectáreas que es mucho más que un simple terreno agrícola. Es el hogar de Noel Díaz, un campesino con una vida amorosa que desafía las convenciones sociales de la isla. A pesar de que la poligamia es ilegal en Cuba, Noel ha logrado mantener relaciones simultáneas con diez mujeres, convirtiéndose en una figura casi mítica en su comunidad.

Noel, conocido tanto por sus habilidades como curandero y artesano como por su vida amorosa, admite que antes de casarse ya tenía siete relaciones a la vez. Tras su matrimonio, intentó ser fiel, pero su condición de priapismo, que lo mantiene en un estado de excitación constante, lo llevó a buscar satisfacción fuera de su matrimonio. Inicialmente, intentó contener sus impulsos con animales, pero finalmente confesó a su esposa su necesidad de tener múltiples parejas.

A lo largo de los años, Noel ha acumulado un total de diez mujeres, con edades que van de los 28 a los 40 años. A pesar de los celos y las dificultades, su esposa oficial ha regresado con él seis veces, aceptando finalmente su estilo de vida. Las mujeres, que incluyen a Debora, Marielis, Isabela, Ana Laura, Rebeka, Yojara, Maidelyn, Dusnay y Xiomara, no solo conocen la existencia de las demás, sino que también mantienen relaciones entre ellas.

La finca de Noel no solo es su hogar y el de sus mujeres, sino también una atracción turística. Los visitantes vienen a recorrer sus tierras, donde se cultiva café, frutos menores y tabaco. Las mujeres de Noel, además de ser sus compañeras, trabajan en la finca, realizando todas las tareas necesarias.

Este guajiro ha hecho un parque ecológico que es lo más parecido a la comunidad primitiva en el siglo XXI.

Noel vive como un cacique moderno, gobernando sobre su pequeño reino compuesto por sus diez mujeres y casi veinte hijos. Aunque algunos lo ven como un aprovechado, él insiste en que sus relaciones son consensuadas y que todas sus parejas están felices y satisfechas.

Este peculiar arreglo ha convertido a Noel en una figura controvertida pero fascinante, un hombre que vive según sus propias reglas en un país donde tales prácticas son poco comunes y oficialmente prohibidas. Su historia es un testimonio de la complejidad de las relaciones humanas y de cómo, en ocasiones, la realidad puede superar a la ficción.