Guía Completa: Cómo Obtener un Poder Especial para Trámites Bancarios en Cuba

Redacción

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El Banco Central de Cuba (BCC) ha lanzado una actualización crucial para los ciudadanos que necesitan realizar trámites bancarios en ausencia del titular de la cuenta. Este proceso, que requiere un poder especial, ha sido detallado por el BCC para brindar claridad sobre los pasos y requisitos necesarios.

Según la nueva normativa del BCC, la única forma de designar a un tercero para manejar asuntos bancarios en nombre del titular es a través de un notario público. Este profesional legal es el único autorizado por la ley para crear un documento que acredite a otra persona como representante del propietario de la cuenta bancaria.

Para acceder a este servicio, los clientes deben presentarse ante un notario público con su carné de identidad, proporcionar los datos del apoderado y especificar las facultades que desean otorgar. La distinción entre un poder universal y uno con facultades restringidas es crucial, ya que el alcance de las autorizaciones varía significativamente. Mientras que un poder universal permite al representante actuar en una amplia gama de asuntos, el restringido limita las operaciones a ciertas acciones definidas en el documento jurídico.

Es esencial que el interesado detalle las facultades que va a otorgar en favor de su representante, asegurándose de que el documento refleje sus necesidades específicas.

En cuanto a los costos, este servicio tiene un valor de 90 pesos cubanos (CUP), la tarifa nacional establecida por las notarías estatales. Además, se requiere la entrega de dos sellos de cinco CUP, disponibles en papel o virtual a través de la aplicación Ticket.

En Cuba, las operaciones bancarias para personas naturales incluyen diversas transacciones en moneda nacional y divisas extranjeras, todas sujetas a las regulaciones del Banco Central de Cuba.

Entre las operaciones comunes se encuentran la apertura y manejo de cuentas, depósitos y retiros, transferencias bancarias, pagos y cobros, créditos y préstamos, emisión y uso de tarjetas de débito, cambio de moneda, servicios de pago electrónico, inversiones y ahorros, así como el alquiler de cajas de seguridad para la custodia de valores.