En la mañana del viernes, un acontecimiento inusual capturó la atención de los habitantes de La Habana: un avión volando a baja altura dejó en el cielo unas imágenes sorprendentes. Este suceso, que generó tanto admiración como inquietud entre los cubanos, fue ampliamente compartido y comentado en redes sociales, especialmente en Facebook, donde el periodista Lázaro Manuel Alonso fue uno de los primeros en informar sobre el fenómeno. Las fotografías mostraban círculos en el cielo, observados principalmente cerca del Aeropuerto José Martí de la capital.
Ante la curiosidad y el asombro generalizados, Alonso aclaró en una publicación posterior que no había ninguna emergencia en los vuelos sobre el territorio cubano y prometió una explicación detallada sobre las «piruetas» observadas en el cielo habanero esa mañana. Poco después, el periodista reveló que una densa niebla sobre el aeropuerto de La Habana había limitado severamente la visibilidad, impidiendo tanto aterrizajes como despegues seguros de las aeronaves.
Esta situación forzó a un avión, que inicialmente volaba desde Colombia hacia La Habana, a realizar maniobras inesperadas y finalmente desviarse hacia Cancún. Desde la terminal aérea confirmaron que retomaron sus operaciones normales a partir de las 8:12 de esa mañana.
Para aclarar aún más la situación, Henry Delgado Manzor, meteorólogo del Aeropuerto Internacional de Varadero y miembro de la Sociedad Meteorológica de Cuba, intervino en la discusión. Explicó que lo observado en el cielo era la estela de sublimación de un avión, un tipo de nube formada por la condensación y posterior transformación en cristales de hielo del vapor de agua emitido por los motores del avión bajo ciertas condiciones atmosféricas.
Delgado detalló que la aeronave, en su ruta desde Colombia, se encontraba en un patrón de espera debido a la niebla densa que cubría el aeropuerto de La Habana, reduciendo drásticamente la visibilidad y haciendo imposible su aterrizaje. Esta maniobra es común en tales circunstancias, y el avión finalmente se dirigió hacia Cancún como aeropuerto alternativo.
Finalmente, Lázaro Manuel Alonso actualizó la información, indicando que a las 9:09 de la mañana un vuelo de American Airlines procedente de Miami había aterrizado con éxito en el aeropuerto de La Habana, señalando que la terminal aérea ya operaba con normalidad.