En la barriada de Lawton, ubicada en el municipio Diez de Octubre de La Habana, los vecinos han tomado una medida drástica ante la acumulación de basura en sus calles. Según un post de Facebook del realizador audiovisual independiente Adrián Martínez Cádiz, la noche del viernes 5 de enero, alrededor de las 11:00 p.m., residentes de Lawton decidieron prender fuego a la basura acumulada en un enorme vertedero situado en las esquinas de las calles de San Anastasio y Carmen.
Un vecino, que prefirió mantenerse en el anonimato por temor a represalias, informó sobre esta acción. La decisión de quemar la basura refleja la desesperación de los residentes ante la falta de soluciones efectivas por parte de las autoridades. Martínez Cádiz señaló que la escasez de combustible en la isla ha exacerbado la situación de los vertederos, afectando gravemente a las comunidades y provocando que en muchos barrios de la capital la basura se acumule hasta el centro de las calles.
Este incidente es un claro indicador del creciente problema de acumulación de desechos en La Habana, impulsado por las dificultades relacionadas con el suministro de combustible. Los vecinos, en un intento por abordar la abrumadora presencia de basura, recurrieron a la medida extrema de incendiar los desechos para deshacerse de ellos.
Martínez Cádiz también expresó su preocupación por la incapacidad del gobierno para gestionar cuestiones básicas, lo que aumenta la preocupación entre los cubanos que ya se ven afectados por la escasez de alimentos, medicamentos y combustible.
En noviembre del año pasado, toneladas de basura en las calles de La Habana esperaban ser recogidas debido a la falta de personal y piezas de repuesto para el parque móvil de los servicios comunales. Las autoridades de la capital reconocieron en un reportaje de la Televisión Cubana que el deterioro de los equipos para realizar la recogida de basura es el principal problema de las empresas encargadas.
Más de 200 equipos estaban paralizados en noviembre por diversas causas, incluyendo 63 camiones colectores y 174 camiones de boteo. Esta situación refleja las dificultades económicas y de gestión que enfrenta Cuba, y cómo estas afectan directamente la calidad de vida de sus ciudadanos, especialmente en aspectos tan fundamentales como la higiene y el saneamiento urbano.
